El analfabetismo funcional


Uno de los grandes males que aún persisten en Guatemala, es el analfabetismo funcional en todos los estratos económicos y sociales; debido a ello, ocurren o cometen interpretaciones antojadizas, elucubraciones, fantasí­as y hasta se llega a la creación de figuras e iconos del realismo mágico.

Fernando Mollinedo
fermo@intelnet.net.gt

He allí­ el resultado de la deficiente formación cultural que recibimos en las instituciones educativas nacionales y privadas, donde aprendimos de forma memorí­stica algunos de los conocimientos que recitamos. Esa es nuestra realidad y no podemos engañarnos con pretender ser un pueblo culto y educado.

SABER LEER, nos permite adquirir conocimientos, ideas y juicios por medio del discernimiento, es decir, utilizando la comprensión de lo que leemos; PERO… sí­ lo que leemos no lo entendemos, lo tergiversamos, adulteramos, falseamos, suplantamos o viciamos con interpretaciones ajenas a lo que nos indica el contexto leí­do, es entonces cuando nos damos cuenta que tenemos el gran problema de ser ANALFABETOS FUNCIONALES.

El término analfabeto según el mejor amigo del hombre: (el diccionario) es un adjetivo que significa: «Que no sabe leer ni escribir. Por extensión. «ignorante, sin cultura, o profano en alguna disciplina». Y la palabra funcional se refiere en este caso, a que la función de leer se ejercita, pero sin la comprensión debida, lo que deja a la persona que lee en la misma situación que tuvo antes de leer. Eso sí­, le da la oportunidad de crear o establecer criterios muy propios acerca de la lectura efectuada.

Todo lo anterior, es un introito a los diversos comentarios que suscitó mi columna de opinión del dí­a lunes, cuando me referí­ a los abusos cometidos por las personas que ejercen el cargo de policí­as municipales con funciones de regular el tránsito de automotores en ciudad Guatemala.

En el mismo, previo a entrar al desarrollo del tema, con letra negrilla consigné las palabras Vox Pópuli lo que significa: la voz popular, entendiéndose como «lo que dice la gente». Transmití­ el sentir de miles de ciudadanos de ambos sexos, estratos económicos, cultura y educación, que han sido ví­ctimas de las iniquidades de dichas personas.

Como ejemplo cito el caso más paradigmático: A UNA AMBULANCIA DE LOS BOMBEROS, CUANDO BAJARON A UNA PACIENTE, LE PUSIERON CEPO POR ESTACIONARSE FRENTE A LA PUERTA DE LA POLICLíNICA DEL IGSS EN LA 17 CALLE DE LA ZONA 1, ¿PRUEBAS? Sí LAS HAY: las fotografí­as publicadas en los periódicos.

Aclaro que por el momento, no me han multado, pero he recibido muchos comentarios personales y he visto y leí­do los periódicos donde publican las acciones prepotentes y abusivas que cometen dichos policí­as: tanto «caballeros como damas». ES NECESARIO QUE APRENDAMOS A LEER.