El abusivo saqueo de una cooperativa (4) –El atraco–


roberto-arias

El lunes pasado, 19 de Nov. de 2012, quienes llegaron temprano a comprar encontraron cerrada la cooperativa. Se comunicaron con algunos asociados para preguntar por qué estaba cerrada. Los asociados no tenían respuesta y se llamaron entre sí. Al filo de la media mañana se habían reunido entre 15 y 18 pequeños y medianos empresarios asociados de la cooperativa y encontraron, a puerta cerrada, a algunos miembros de la junta directiva.

Roberto Arias


Los ladrones entraron a Copagua, dicen, el domingo en la madrugada. Dicen que el guardián fue maniatado (aunque no se encontró evidencia alguna del hecho, ni siquiera la cuerda con la que fue atado). Convenientemente encontraron y quebraron el receptáculo que contenía la copia de llave del portón de entrada y lo abrieron sin forzar la cerradura. Los ladrones utilizaron el montacargas para cargar cantidades fuertes de papel y llevárselo. Dentro de las computadoras que hay, los ladrones lograron descifrar el misterio de cuál es la que grababa las imágenes de las cámaras que instaló el hijo del anómalo presidente de la junta directiva, Byron Antonio Cabrera García, y fue la única que se robaron. Los asociados se percataron del sinnúmero de incongruencias que se dieron en el robo, por lo que algunos llegaron a la elemental conclusión de que se trata de un auto robo. Quién sabe cuáles serán las conclusiones de la policía, del Ministerio Público y de la aseguradora.

Anteriormente se entraron a la sucursal de Escuintla y el seguro pagó el daño, aunque del dinero devuelto por el seguro, unos cien mil quetzales, las cuentas no quedaron claras, según manifiestan algunos asociados.

Independientemente de cómo resuelvan las autoridades sobre el robo del domingo en la madrugada, la mayoría de asociados teme que el seguro no pague, debido a la enorme cantidad de incongruencias y contradicciones que ellos vieron en las explicaciones que los nerviosos miembros de la junta directiva les dieron. Ellos, dadas las serias anomalías financieras y contables que se han dado en la Copagua, definitivamente aseguran que fue un robo interno.

Los informes contables de 2010 de la Copagua, con abstención de opinión de la firma de auditores externos, no los avalaron por estar anómalos; no obstante lo anterior, los mafiosos directivos contrataron otros auditores que sin corregir lo anómalo y para mantener ocultas sus fechorías, avalaron con dictamen favorable el informe en el mes de mayo de 2011. En el mes de octubre de 2011 mediante una maniobra contable que pretendía hacer el cuñado del anómalo presidente de turno, salió a luz que el costo de venta presentado en los estados financieros de 2010 es falso, el resultado fue reflejar utilidades inexistentes en el periodo de 2010, tratando de ocultar la podredumbre en que tienen a la cooperativa. Ojo, auditores  de Ingecop, dicen los asociados de la Copagua que están a la espera de su fiscalización efectiva para tomar las pertinentes acciones legales.

Lo más deprimente de esta situación que envuelve a todos los cooperativistas de Guatemala, es que no hay entidad rectora y fiscalizadora a la que se pueda acudir, que funcione honestamente como tal. Conforme a la Ley General de Cooperativas, en el artículo 65 del Reglamento, el Ministerio de Economía es el órgano de comunicación del Instituto Nacional de Cooperativas (Inacop) con el Organismo Ejecutivo. El Ministerio de Economía se hizo atrás.

La corrupción no permite el desarrollo.