El primer refugio estadounidense para adictos a internet abrió sus puertas en Estados Unidos recibiendo a un adolescente fanático del videojuego de rol en internet World of Warcraft.
El chico de 19 años cambió sus búsquedas en el mundo virtual de Azeroth por alimentar con mamadera a crías de cabras y construir un gallinero como parte del programa de recuperación ReStart de adictos a internet en una hacienda en el estado de Washington.
«Somos un lugar muy aburrido; nada de tecnología», dijo el jueves la psicoterapeuta Hilarie Cash.
«Un jugador no podrá entretenerse en ningún momento cuando está aquí, porque el juego es su droga de elección», explicó.
Cash y la terapeuta Cosette Rae abrieron este refugio para adictos a internet en julio, como un centro de internación para reconectar a los adictos a la red al mundo real.
«No somos antitecnología», dijo Cash. «Se trata de ayudar a personas adictas a la tecnología a soportar el abandono y ayudar a sus cerebros a volver a conectarse con el mundo de un modo positivo».
Las adicciones a internet y los videojuegos se han convertido en un problema creciente en la última década, con la penetración cada vez mayor de la tecnología en la vida diaria, según la psicoterapeuta.
«El problema está empeorando», dijo Cash. «Cada vez más niños son criados desde pequeños con tecnología. Si se les permite pasar demasiado tiempo con eso, su desarrollo no es equilibrado».
El programa de rehabilitación incluye enseñar técnicas para iniciar conversaciones e interpretar el lenguaje corporal.
Los adictos a los videojuegos necesitan ser reprogramados para ser conscientes de actividades diarias como bañarse, cocinar y realizar tareas domésticas, según la organización. También necesitan asesoramiento en relación con las citas.
«El jugador típico es alguien que se quedó rezagado en las habilidades sociales y le falta confianza», explicó Cash.
Los videojuegos están diseñados para sumergir a los jugadores en mundos de fantasía y mantener su atención con recompensas intermitentes como nuevos poderes para sus personajes y revelaciones sobre el argumento.
«Los juegos están realmente diseñados para mantener a la gente enganchada», dijo Cash. «Quienes quedan atrapados son personas realmente vulnerables para quienes el mundo es doloroso o les da miedo».
Las computadoras e internet también son refugios para niños deseosos de escapar de los golpes que implica crecer.
«La niñez puede ser difícil para cualquiera», dijo Cash. «Tienes muchos niños que son tímidos o tienen vidas hogareñas miserables o baja autoestima o les cuesta la escuela. Son todos chicos atraídos por la seguridad de una pantalla».
Los niños que pasan demasiado tiempo en compañía de computadoras o consolas de videojuegos pueden crecer como adultos inadaptados socialmente, según la organización.
El refugio tiene camas para seis pacientes. Una estadía de 45 días cuesta 14.500 dólares más dinero para gastos diarios como alquilar un equipo de acampada para aventuras campestres.
El centro también trata a adictos como pacientes externos. En su mayoría son jóvenes de 18 a 28 años con «una amplia exposición a la pornografía pero no mucho al sexo».
ReStart tiene un programa de 12 pasos similar al utilizado para adictos al alcohol y las drogas.