Tres cuartas partes del departamento de Petén podrí­an estar amenazadas por la desertificación, si en un corto tiempo no se regula el uso de las cuencas hidrográficas y de los bosques, según el viceministro de Ambiente, Luis Zurita.

De acuerdo con el funcionario, en el paí­s actualmente son 19 los departamentos donde más altos niveles de sequí­a se reportan, los cuales están concentrados en el «Corredor Seco» mesoamericano, que parte desde El Salvador, y en tierras guatemaltecas, desde Chiquimula, Zacapa, El Progreso, Jutiapa, Jalapa, el cual se prolonga hasta Quiché, Huehuetenango y la mitad del departamento de Baja Verapaz.

«Tenemos que regular el uso del agua, y determinar que la primera necesidad es tomarla; hay que regularla para que se puedan producir granos básicos», apuntó Zurita.

Las principales causas de la sequí­a y la desertificación, de acuerdo con información oficial, son los cambios en el uso del suelo, el excesivo pastoreo, la deforestación, las rozas indiscriminadas, la migración y el crecimiento poblacional acelerado.

Actualmente, como consecuencia de la sequí­a, al menos en el departamento de Jalapa se ha reportado una situación alarmante debido a la crisis alimentaria en la que viven sus pobladores. A la fecha, al menos se ha reportado el fallecimiento de 22 personas por desnutrición aguda.

El departamento de Petén serí­a el segundo con mayor grado de sequí­a, únicamente superado de Zacapa.

MAYOR CONFLICTIVIDAD

De acuerdo con el funcionario el uso irracional que se hace de los recursos naturales es una de las causas del hambre, lo cual aumentarí­a los conflictos sociales y por ende los problemas de gobernabilidad ambiental.

«(…) El cambio climático puede traer grandes conflictos en gobiernos tan vulnerables como los nuestros, que pueden durar uno o seis meses, porque la gente va a presionar porque necesita comida y al no dársele van a caer (los gobiernos)», apuntó Zurita.

El asesor de Economí­a y Ambiente del Ministerio de la cartera ambiental, dijo que otro de los efectos colaterales de la sequí­a es que la contracción de la producción se hará más evidente a fin de año, por lo que los productos de la canasta básica se encarecerí­an y se producirí­a un incremento en la inflación.

Recientemente, las autoridades de Ambiente presentaron la polí­tica de cambio climático al gabinete socioambiental y este jueves será presentado al despacho de la vicepresidencia.