Ejemplar atención a jubilados en la Municipalidad


De las trescientas y pico de municipalidades de la república, son pocas las que prestan servicios eficientes a los habitantes de las respectivas jurisdicciones.

Marco Tulio Trejo Paiz

Las autoridades edilicias dedican horas y horas a las pláticas politiqueras con sus paniaguados, y eso es asaz negativo, insoportable y censurable. Empero, justo es exceptuar a la minorí­a.

Ahora bien, en las diferentes dependencias de la Municipalidad Metropolitana es otra la situación. Es otro el cantar… Como que la politiquerí­a se ha dejado en la calle por disposición plausible de don ílvaro Arzú para que se trabaje con eficiencia.

Ejemplo de lo que decimos es lo que se observa en el amplio local donde se tramitan las supervivencias que exige el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social a los jubilados, hombres y mujeres que han sido pensionados por la mencionada institución que fue fundada durante la administración del doctor Juan José Arévalo.

La dependencia municipal instalada en el primer nivel del «Palacio de la Loba» está bien equipada «a la última», como suele decirse, para prestar buen servicio al público.

Parece ser que ni el gobierno nacional funciona una dependencia como la de la comuna a que nos referimos.

¡Y qué cortesí­a la que se brinda a los cientos o miles de personas que se abocan a diario al atractivo local de labores edilicias!!!

Es de significarse, además, que en la misma dependencia viene trabajando últimamente una diligente señorita perteneciente al personal administrativo del IGSS, quien se encarga especí­ficamente de recibir las constancias de supervivencia, y a los jubilados y jubiladas les entrega los atestados y se reserva los que desgaja para llevarlos a la oficina del IGSS a la que tení­an obligadamente que ir a entregar los añosos jubilados, quienes a duras penas podí­an subir numerosas gradas y hací­an colas tan largas como las de ciertos personajes «honorabilí­simos» que hacen buenas migas…

Todas las municipalidades del paí­s deberí­an ahorrar problemas de tiempo y de gastos, mediante la modernización de sus dependencias de servicio al público en general, pero, eso sí­, no aprovechándose deshonestamente de las compras de los equipos correspondientes como se ha denunciado en muchos casos.

Es digno de hacer notar que en todo el edificio de la Municipalidad de Guatemala pueden los visitantes apreciar un ambiente «lí­mpido y reluciente» muy agradable, sobre todo los servicios que se prestan con eficiencia ejemplar.

La obtención de los documentos de supervivencia en mención no se lleva más de media hora o, a lo sumo, aproximadamente 45 minutos, no obstante que la concurrencia de solicitantes es multitudinaria por lo regular cada dí­a.

Preocupa a mucha gente de nuestro alegre valle de lágrimas el que dentro de año y medio puedan caer en la alcaldí­a que en el segundo perí­odo de actividades desempeña con dinamismo y loables iniciativas su titular, don ílvaro que, valga decir, es todo un carácter, muy emprendedor y desarrollista de importantes proyectos de trabajo que necesita la urbe capitalina para lucir indumentaria moderna…

Y, a propósito de las próximas elecciones generales, ya que se presenta la oportunidad, es deseable y patriótico que los ciudadanos sepan elegir al alcalde y a los concejales en razón de sus cualidades y calidades -para que la obra municipal sea efectiva y positiva-, al margen de toda politiquerí­a partidista que tanto daño ha causado y sigue causando a Guatemala y a los guatemaltecos.