Uno de los implicados en el bombazo que dejó 15 muertos y centenares de heridos en una concurrida estación del metro en Bielorrusia, fue ejecutado, dijo hoy su madre.
Luvob Kovaleva señaló a la agencia noticiosa RIA Novosti que recibió aviso oficial de la ejecución de su hijo Vladislav.
Kovalev y Dmitry Konovalov, ambos de 26 años, fueron declarados culpables en noviembre de la colocación de la bomba que estalló en abril de 2011 en una concurrida estación del metro en Minsk, capital de Bielorrusia.
Los investigadores dijeron que el «odio a la humanidad» fue el motivo de ambos individuos para la comisión del atentado, no causas políticas ni religiosas.
Sin embargo, los abogados defensores aseguran que las autoridades sólo presentaron pruebas triviales y poco concluyentes durante el juicio.
El presidente autoritario de la nación, Alexander Lukashenko, rechazó la semana pasada las peticiones de clemencia para ambos individuos.
La ex república soviética de Bielorrusia es la última nación de Europa que todavía efectúa ejecuciones.