Una pintura de Henri Matisse robada hace más de una década de un museo en Caracas será entregada al Estado venezolano por funcionarios estadounidenses el próximo 7 de julio, anunció el jueves la fiscal general, Luisa Ortega Díaz.
«Odalisca con pantalón rojo» de Matisse, hurtada del Museo de Arte Contemporáneo de Caracas en el 2000, será entregada a un director general de actuación procesal del Ministerio Público que viajará a Estados Unidos para coordinar la repatriación de la obra, dijo Ortega Díaz en un programa de la radio estatal.
El gobierno decidió repatriar la pintura luego que una comisión venezolana certificó en agosto del 2013 su autenticidad.
La periodista Marianela Balbi, que escribió una amplia investigación sobre el caso en el libro «El rapto de la Odalisca», afirmó el jueves que aunque es positivo que Venezuela haya recuperado la obra, aún existe impunidad sobre el caso debido a que las autoridades no han logrado esclarecer quiénes fueron los responsables del hurto en el país suramericano. «No hay un caso cerrado en Venezuela», agregó.
«Espero como todos los venezolanos que los museos estén en verdaderas condiciones de seguridad para que le garanticen a los venezolanos que un caso como este no vuelva a ocurrir», dijo Balbi a la AP en entrevista telefónica.
La AP solicitó al Ministerio de Cultura de Venezuela una reacción sobre la recuperación de la obra, y una vocera de prensa indicó que las autoridades esperarían a que la obra llegue a manos del gobierno para pronunciarse sobre el caso.
La certificación de la obra fue realizada por Wanda de Guebriant, directora de los Archivos Matisse de París, informó la Cancillería venezolana.
La pintura data de 1925 y está valorada en unos 3 millones de dólares. Fue localizada en julio del 2012 cuando una pareja intentó venderla a agentes encubiertos del FBI en un hotel de Miami Beach.
El Departamento de Estado estadounidense se comunicó con las autoridades venezolanas para regresar el cuadro luego de culminar a inicios del 2013 el juicio contra el cubano Marcuello Guzmán, de 46 años, y la mexicana María Ornelas Lazo, de 51, quienes fueron condenados a 33 y 21 meses de prisión, respectivamente, por tratar de vender el cuadro robado.
Las primeras versiones sobre el robo de la obra surgieron en noviembre del 2002, luego que el coleccionista venezolano Genaro Ambrosino envió un correo electrónico a varias personas para expresar su indignación y sorpresa porque el cuadro de la «Odalisca» fue puesto a la venta en Miami. A partir de esa denuncia se examinó una pintura que estaba en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas y se descubrió que era una réplica.
Desde ese momento las autoridades venezolanas iniciaron las pesquisas para tratar de determinar cómo ocurrió el robo del cuadro, hecho que la Fiscalía General sostiene que sucedió en 2000.