El comandante saliente de la Quinta Flota de Estados Unidos, que cuenta con un nuevo portaaviones para garantizar la libertad de navegación en el Golfo y vigilar a Irán, se proclamó «preocupado» por la posibilidad de que «un error de cálculo» de parte de Teherán desencadene una guerra.
En una entrevista el lunes por la noche en Manama, sede de la Quinta Flota, con un reducido grupo de periodistas, entre ellos un corresponsal de la AFP, el almirante Patrick Walsh acusó igualmente a Irán de «intimidar» y «provocar» a sus vecinos con su retórica y sus maniobras militares.
«Es sin duda lo que estamos tratando de evitar (…): un error que desencadene luego una guerra», afirmó.
El mismo día de estas declaraciones, un segundo grupo aeronaval, dirigido por el portaaviones estadounidense «USS John C. Stennis», entraba en el mar de Omán, en la zona de operaciones de la Quinta Flota, alcanzando así al «USS Dwight D. Eisenhower».
Es la primera vez desde 2003 y la invasión de Irak que Estados Unidos cuenta con dos grupos aeronavales en la región, mientras aumentan los rumores sobre un posible ataque de Washington contra Irán.
La creciente tensión entre los dos países es sobre todo consecuencia del programa nuclear iraní y la negativa de este país a suspender sus actividades de enriquecimiento de uranio. Washington teme que Teherán quiera dotarse de la bomba atómica.
Pero Estados Unidos acusa igualmente a Irán de estar implicado en la ola de violencia en Irak y de proporcionar explosivos a los extremistas que atacan las tropas norteamericanas.
El almirante Walsh indicó que el despliegue del «Stennis» se prolongará, en principio, «numerosos meses», pero aseguró que su llegada «(no es) necesariamente una señal precursora de acciones ofensivas» contra Irán.
Walsh precisó, además, que este grupo aeronaval, que se encontraba el martes frente a las costas de Pakistán, «(proporcionará) apoyo a las operaciones en Afganistán».
«Hay un compromiso internacional para intentar resolver esta crisis (sobre el programa nuclear iraní) por vías diplomáticas, a través del Consejo de Seguridad de la ONU y la AIEA» (Agencia Internacional de la Energía Atómica), recordó, agregando que los países de la región desean que se encuentre una salida pacífica a la crisis y que Washington está «muy a favor de esto».
Pero el almirante Walsh, que dirigía la Quinta Flota desde octubre de 2005, no ocultó los temores que le produce el comportamiento de Irán.
«Amenazan con utilizar el arma del petróleo, amenazan con cerrar el estrecho de Ormuz», señaló en referencia a antiguas declaraciones de dirigentes iraníes.
«Es pues la combinación de la retórica, del tono y de maniobras agresivas en un espacio marítimo muy restringido lo que nos preocupa», agregó el almirante, de 52 años, que dejará Manama a finales de este mes para pasar a ser el número dos de la Marina de Estados Unidos.
Walsh considera que la situación se ha deteriorado en los últimos 18 meses y que la actitud de Teherán en este periodo se ha vuelto «más estridente, más chillona, más arrogante».
El almirante subrayó, en particular, las maniobras militares de noviembre, conocidas como «Gran Profeta II», en las que Irán realizó disparos de misiles balísticos en el Golfo y, según Walsh, «exhibió minas (…) para que todo el mundo las viese», algo que él considera un mensaje muy claro.
El comandante de la Quinta Flota recalca, sobre todo, el hecho de que dichas maniobras y disparos hayan estado «concentrados en el estrecho de Ormuz», lugar de paso estratégico por donde circula aproximadamente el 20% de la producción mundial de bruto.
«La única conclusión a la que podemos llegar es que esto estuvo destinado a intimidar y a provocar» a los países de la región, declaró.
Ante dicha actitud, Washington está decidido a «apoyar con firmeza a (sus) amigos» en el Golfo.
Pero «lo que me preocupa, son los errores de cálculo», repitió Walsh. «Estamos muy preocupados por el tono adoptado desde la (del Estado iraní), que se repercute en los comandantes» de los barcos iraníes que se codean en alta mar con los de la Quinta Flota, añadió el almirante.
Un segundo portaaviones estadounidense, el «USS John C. Stennis» llegó el lunes a Oriente Medio, donde se unió al «USS Dwight D. Eisenhower» desplegado en la zona de operaciones de la V Flota naval de Estados Unidos, se anunció en un comunicado publicado en Manama.
El «USS John C. Stennis» y su grupo aeronaval entraron el lunes en la zona de operaciones de la V flota» en especial «para entregar un apoyo a las fuerzas terrestres que operan en Afganistán y en Irak», indica el comunicado publicado en Manama, la capital del reino de Bahrein, en el Golfo.
Un portavoz de la V Flota en Manama, precisó que el «USS John C. Stennis» se encontraba el martes en la mañana en el mar de Oman, frente a las costas paquistaníes, al noreste de la zona de operaciones de la V Flota.
Agregó que el «USS Dwight D. Eisenhower», que había abandonado el 4 de febrero las costas de Somalia, se encontraban también en el mar de Oman.
Se ignora cuándo estos dos portaaviones entrarán al Golfo, pues la marina norteamericana no da a conocer los movimientos de sus unidades.