Estados Unidos está entrenando a combatientes seglares sirios en Jordania en un intento por fortalecer las fuerzas que combaten al régimen del presidente Bashar Assad y controlar la influencia de los radicales islamistas entre la persistentemente dividida oposición del país, informaron funcionarios estadounidenses y de otros países.
WASHINGTON Agencia AP
El entrenamiento se realiza desde hace varios meses en un lugar no especificado de Jordania y en él participan fundamentalmente suníes y beduinos que anteriormente fueron parte del ejército sirio, dijeron las autoridades a The Associated Press. Las fuerzas no forman parte del principal grupo rebelde, el Ejército Libre Sirio, que Washington y otros temen que esté quedando cada vez más bajo la influencia de grupos milicianos extremistas, entre ellos algunos vinculados con al-Qaida, agregaron.
La operación está dirigida por organismos del espionaje estadounidense y está en curso, agregaron las autoridades, pero en Washington se hizo hincapié en que Estados Unidos sólo ofrece asistencia no letal por el momento.
Otros gobiernos, como los de Gran Bretaña y Francia, también participan, añadieron, aunque no se sabe con claridad si algún gobierno occidental está entregando material militar u otro apoyo militar directo tras dos años de guerra civil, que según la ONU ha dejado un saldo de más de 70.000 muertos.
Los funcionarios hablaron bajo condición de no ser identificados porque no estaban autorizados para hablar públicamente sobre el programa.
Oficialmente, el gobierno del presidente Barack Obama ha sido vago sobre qué tipo de entrenamiento militar ha ofrecido, a la vez que ha insistido en que hace todo lo que puede sin llegar a entregar armas a los rebeldes o participar en una intervención militar, para acelerar al derrocamiento de la dictadura de la familia Assad, que lleva cuatro décadas en el poder.
Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca, dijo el lunes que Estados Unidos ha «dado cierta asistencia logística no letal que ha sido provechosa para los rebeldes sirios que siguen combatiendo a un régimen que no duda en usar todo su poderío militar contra su propio pueblo».
«Eso es algo en lo que vamos a tener que seguir trabajando para poner fin a la situación», les dijo a los reporteros.
No está claro qué efectos haya tenido el entrenamiento en el conflicto, que se ha empantanado ya que el régimen de Assad no puede destruir la rebelión y la oposición siria, hasta el momento, ha sido incapaz de asestar un golpe realmente fuerte al control del gobierno en Damasco y controlar buena parte del país.
Algunos de los sirios que reciben entrenamiento de Estados Unidos, a su vez entrenan a otros sirios, dijeron funcionarios.
Los funcionarios declinaron ofrecer más información alegando razones de inteligencia. Por su parte, autoridades del Departamento de Defensa insistieron que el Pentágono no participa en ningún entrenamiento o entrega de armas a los rebeldes sirios, directa o indirectamente. La CIA declinó comentar al respecto.