Educación para áreas marginadas


Dr. Ismael Gómez Sánchez, O-16 54132, ismael1968@intelnett.com

Una de las normas del Ministerio de Educación para crear una escuela y plaza es que existan por lo menos 30 alumnos. Esto es factible para comunidades de un tamaño regular, pero hay comunidades de solamente 10 familias que no completan la cantidad requerida; por otro lado, estas familias viven tan lejos o quizás no tan lejos de una escuela, pero tampoco pueden enviar a sus hijos a la escuela solos; el papá sale a trabajar y la mamá no puede ir a dejarlos porque tiene que cuidar a sus más pequeñitos.

Para estas familias, el Ministerio de Educación podrí­a crear sistemas de educación a distancia como lo que realiza el Colegio Hebrón. Obviamente que este tipo de educación pareciera requerir un completo sistema y pareciera también que es solo para familias pudientes y que saben leer y escribir; sin embargo, la comunidad podrí­a identificar a un promotor de educación que sea el tutor de los niños de su comunidad en el caso de que ninguno de los padres no sepa leer ni escribir. También existe la posibilidad de crear una forma de práctica supervisada de alumnos de Magisterio que podrí­an apoyar en estas comunidades. Como otra opción podrí­a ser que el mismo maestro que da clases en una comunidad durante la mañana podrí­a desplazarse a por lo menos otra comunidad a dar clases en la tarde o en plan sábado y domingo. Existen algunos colegios que ya tienen experiencia en esto, como el Instituto América Latina y otros cuyo servicio es relativamente de bajo costo y que podrí­an involucrarse en apoyo al Ministerio de Educación. Es claro que el marco legal podrí­a no permitir este tipo de cambios, sin embargo también es claro que la ley se hace por el hombre no el hombre por la ley, por lo tanto, la ley deben permanecer o ser modificada de acuerdo con las necesidades de las familias. Creo que de la misma manera en que el Ministerio de Educación está velando por la calidad educativa de los colegios, también tiene la responsabilidad de ejecutar calidad educativa en sus escuelas públicas, no discriminando a aquellas familias de escasos recursos de comunidades marginadas. Mientras que el Ministerio se preocupa por la calidad educativa y las cuotas de los colegios, muchos niños se están quedando sin estudiar en las áreas marginadas rurales e inclusive urbanas marginales.