Los dueños de la NFL aprobaron ayer por una mayoría arrolladora una tentativa de acuerdo que pondría fin al cierre patronal de la liga, en caso de que los jugadores restablezcan su sindicato y acepten esa propuesta.
COLLEGE PARK / Agencia AP
Pero los jugadores no votaron y dejaron en el limbo al menos por otro día al deporte más popular del país.
Los dueños y los jugadores no se vieron las caras durante meses, así que lo ocurrido ayer no resultaría tan sorpresivo.
Alrededor de las 7:00 de la noche (2300 GMT), los dueños votaron por 31-0, con la abstención de los Raiders de Oakland, para aprobar el acuerdo, que quedó a la espera del visto bueno de los jugadores. Poco después, la liga emitió un comunicado de prensa en el que anunció: «los clubes de la NFL aprobaron hoy los términos de un arreglo amplio del litigio y un nuevo contrato colectivo por 10 años, con la Asociación de Jugadores de la NFL».
Menos de una hora después, el líder de la Asociación, DeMaurice Smith, envió un correo electrónico a los representantes de los equipos, y señaló: «algunos temas que necesitan ser negociados en forma colectiva siguen abiertos; otros asuntos, como la compensación de los trabajadores, asuntos económicos y las cláusulas por la terminación de un contrato, siguen sin resolverse. No hay acuerdo entre la NFL y los jugadores en este momento. Estoy ansioso por tener nuestra llamada esta noche».
Entonces, los jugadores realizaron esa conferencia telefónica y decidieron no votar, al indicar que no habían visto la propuesta completa aprobada por los dueños.
El comisionado Roger Goodell habló el jueves varias veces por teléfono con Smith. Una de esas llamadas fue para informarle los resultados de la votación antes de que fueran anunciados.
«Ojalá que podamos trabajar en forma rápida y expedita para que este acuerdo se realice», dijo Goodell durante una conferencia de prensa en un hotel del área de Atlanta. «Es tiempo de volver al fútbol (estadounidense). Eso es lo que quieren todos aquí».
Pero varios jugadores escribieron en sus cuentas de Twitter, expresando oposición a la propuesta aprobada por los dueños. El safety de los Steelers de Pittsbugh, Ryan Clark, escribió: «Los dueños quieren que ustedes crean que han sido extremadamente justos en todo y que están entregando una rama de olivo para resolver esto».
El cierre de cuatro meses representa el primer paro de labores de la NFL en 1987.
El primer partido del calendario de pretemporada, el juego del Salón de la Fama previsto para el 7 de agosto, entre Chicago y San Luis, fue cancelado el jueves.
«Hay muy poco tiempo», dijo Goodell. «Desafortunadamente, no vamos a ser capaces de jugar el partido este año».
Las instalaciones del equipo abrirían el sábado, y el nuevo año de la liga comenzaría el miércoles, señaló el comisionado. Pero todo ello depende de que los jugadores aprueben también el acuerdo.
Los dueños ejercieron una cláusula de rescisión del viejo contrato colectivo en el 2008, lo que preparó la escena para el conflicto actual. El nuevo contrato no incluye esa cláusula.
«No puedo decir que logramos todo lo que queríamos en el acuerdo», dijo el propietario de los Giants de Nueva York, John Mara. «Estoy seguro de que los jugadores dirán lo mismo… Lo mejor de esto es que nuestros aficionados no tendrán que escuchar nada sobre las relaciones laborales durante otros 10 años».
El antiguo contrato colectivo expiró el 11 de marzo, cuando se rompieron las negociaciones entre el sindicato y la directiva. Los dueños declararon el cierre patronal horas después. Desde entonces, los clubes no han podido comunicarse con sus jugadores actuales. Los agremiados, incluidos los que fueron elegidos en el reclutamiento colegial en abril, no han podido firmar sus contratos, y los equipos no pagaron el seguro de salud de los jugadores.
El marco básico para el nuevo modelo económico de la liga, incluida la forma de dividirse más de 9.000 millones de dólares en ingresos anuales, se estableció durante una serie de negociaciones, la semana pasada.
«Estas cosas, por su naturaleza misma, no deberían ponerlo a uno necesariamente feliz cuando sale por la puerta. Fue una negociación», dijo el dueño de los Cowboys, Jerry Jones. «No quiero sonar negativo, pero no es como si la Navidad hubiera llegado».
Los asuntos finales involucraban cómo resolver tres casos pendientes en la corte, incluida la demanda antimonopolio presentada contra la NFL en un tribunal federal en Minnesota por Tom Brady y otros nueve jugadores. El abogado de la NFL, Jeff Pash, dijo que los dueños entienden que el caso será desechado.
Algo que los dueños buscaron desde el principio y que no lograrán al menos por ahora es la expansión de la temporada regular, de 16 a 18 partidos. Ello no cambiará antes del 2013, y los jugadores deben aprobar la modificación.