Dos visiones de Polonia


Jaroslaw Kaczynski lleva una arreglo floral a su hermano Lech, quien dejó vací­a la silla presidencial en Polonia. FOTO LA HORA: AFP Jacek Bednarczyk

Los polacos elegirán el domingo al sucesor del presidente Lech Kaczynski, fallecido en un accidente de avión, en comicios que exponen sus hondas divisiones entre los liberales proeuropeos de Bronislaw Komorowski y los conservadores nacionalistas de Jaroslaw Kaczynski, gemelo del mandatario difunto.


«Más que nunca, hay dos visiones del Estado e incluso de la civilización frente a frente», afirma Edmund Wnuk-Lipinski, sociólogo del Instituto de Estudios Polí­ticos de Varsovia.

«Una es abierta, representada por la Plataforma Cí­vica (PO), el partido de Bronislaw Komorowski, y la otra es un repliegue hacia dentro, encarnada por el Partido Derecho y Justicia (PiS)» de Jaroslaw Kaczynski, considera.

Según una encuesta publicada el viernes, Komorowski, de 58 años, podrí­a obtener el 51% de los votos, aunque otros sondeos afirman que el duelo con Kaczynski, de 61 años, se dirimirá en una segunda vuelta el 4 de julio.

Komorowski es el presidente de la cámara baja del Parlamento y jefe de Estado interino desde la muerte de Lech Kaczynski, el 10 de abril, en un accidente de avión en Smolensk, en el oeste de Rusia, en el que también murieron su esposa y otros 94 pasajeros.

La elección presidencial está fuertemente marcada por esa tragedia, así­ como por las recientes inundaciones que devastaron el sur del paí­s.

En ese marco de desgracias, los sí­mbolos se convirtieron en elementos esenciales de las campañas electorales, comenta a la AFP Eryk Mistewicz, especialista en márketing polí­tico.

«No hay ningún debate de fondo y en realidad nadie lo espera», dice el especialista, añadiendo que los términos «Polonia», «patriotismo» o «familia» están muy presentes en los discursos de los dos principales candidatos.

Conocido por su virulenta retórica contra sus adversarios, Kaczynski ha tratado esforzado en mantener un lenguaje moderado durante su campaña electoral.

En duelo por la muerte de su hermano gemelo, el candidato conservador ha llamado a sus compatriotas al consenso, al igual que su adversario. También ha tenido gestos hacia Rusia y Alemania, todo un giro teniendo en cuenta el discurso a menudo hostil que mantuvo contra ambas potencias durante su mandato como primer ministro, de 2006 a 2007.

Komorowski también se ha guardado de atacar de frente a su principal adversario.

Sin embargo, en la opinión pública, las divisiones entre los simpatizantes del partido liberal PO en el poder y los de la oposición conservadora del PiS son muy visibles y se han exacerbado, según los analistas.

«Esas divisiones siempre han existido, pero la catástrofe de Smolensk ha hecho que exploten emociones hasta ahora contenidas», considera Wnuk-Lipinski.

«Si cortamos la sociedad en dos con un hacha, Polonia no saldrá de ésta más fuerte ni más patriótica, sino profundamente dividida», advirtió recientemente Wlodzimierz Cimoszewicz, ex primer ministro de izquierda que apoya a Komorowski.

El viernes, Jaroslaw Kaczynski fue a orar junto a la tumba de su hermano Lech, acompañado por su sobrina Marta, hija del difunto presidente en la cripta de la catedral de Wawel, en Cracovia (sur), donde se encuentra la tumba de la pareja presidencial, según las imágenes de la televisión.

Se trataba de una visita «estrictamente privada», dijo a la AFP Pawel Poncyliusz, un portavoz del estado mayor del candidato conservador.

Su principal rival, el liberal Bronislaw Komorowski, dejó el jueves un ramo de flores en la tumba de Lech Kaczynski y su esposa Marí­a.