Galerí­a El Attico presenta actualmente dos muestras artí­sticas: la obra reciente de Rafael Dussan y la colección «Enigmas» de Luis Castellanos.

El Attico (4ª. Avenida 15-45 zona 14) inició ayer la exposición de la obra en técnica mixta de Rafael Dussan sobre su obra reciente en el salón principal. La exposición estará abierta hasta el 31 de agosto.

Por su parte, desde la semana pasada, está abierta la exhibición de arte de objetos, denominada «Enigmas», de Luis Castellanos, la cual estará abierta hasta el 28 de agosto en el Salón Coleccionista.

DUSSAN

Rafael Alfonso Dussan Mejí­a es un artista colombiano, que se formó en dos planos: las artes plásticas y las ciencias humanas.

Su trabajo está ligado particularmente al cuerpo humano a través del dibujo sobre distintos soportes y técnicas. El desarrollo de su obra es un conocimiento continuo de la naturaleza humana, asociado a la experimentación del dibujo.

Vive y trabaja en Europa desde el 2002 (Francia e Italia). A partir de 1990, participa en exposiciones individuales y colectivas en Colombia y el exterior (Caribe y Centroamérica, Estados Unidos, Francia, Alemania, Bélgica e Italia).

El trabajo de Dussan gira en torno al cuerpo humano, como expresión fundamental de la vida, como posibilidad de existencia y condición ineluctable de nuestra mortalidad.

Del cuerpo como lugar de posibilidades y de relaciones con los demás y la realidad, como lugar en el mundo. Del cuerpo-huella, del cuerpo-trazo, del cuerpo vivido y sentido, del cuerpo inscrito en el tiempo, cambiante y siempre distinto, dinámico y en movimiento.

El cuerpo más allá de las modas y de la estética, parámetros generalmente asociados al occidente europeo.

Los cuerpos que recuerdan la multiplicidad de raí­ces, de infinitos mestizajes.

El cuerpo del placer y el goce, el cuerpo del dolor y la ternura, el cuerpo joven y de la vejez, el cuerpo sereno y grotesco.

ENIGMAS

Por su parte, Luis Castellanos es un artista guatemalteco que reside en Ocean Drive, Estados Unidos desde hace varios años, y que visita nuevamente nuestro paí­s para mostrarnos una colección de trabajos muy originales en los que traslada sus ideas a través de técnicas mixtas.

Los temas escogidos tienen mucho de religioso, histórico, fantástico con una base totalmente surrealista; rememoran anécdotas chapines, tales como el año en el que mandaron a envenenar las palomas de la Catedral, pues las mismas dañaban la fachada del edificio y que el artista representa a través de una vitrina en la que por medio de pintura, objetos hallados y un texto sobre metal, traslada al observador sus impresiones sobre este asunto.

Castellanos se define como autodidacto, pero ha recibido clases con Manolo Gallardo y Roberto Cabrera, lo que definitivamente sentó las bases e inquietudes de sus actuales manifestaciones. Estas creaciones las desarrolla en dos categorí­as muy marcadas, la primera consiste en objetos escultóricos compuestos por elementos encontrados y adaptados para integrar un todo que cuentan una historia muy personal y que probablemente al observador le evoquen otras vivencias. La segunda categorí­a consta de vitrinas dentro de las cuales están encerradas con fondos de grabados o pinturas, piezas que van desde flores secas y plumas de aves hasta metales y acrí­licos.