Las autoridades sanitarias de República Dominicana anunciaron ayer un protocolo especial para prevenir y atender los casos de fiebre chikungunya, que ha afectado a más de 14 mil personas en 20 de las 32 provincias desde finales marzo y avanza con velocidad.
El protocolo establece los lineamientos para la detección precoz de la enfermedad, la cual se trasmite a través de la picadura del mosquito aedes aegypti, dijo el ministro de Salud, Alfredo Hidalgo, en conferencia de prensa.
La guía será distribuida esta semana a todos los establecimientos médicos del país, incluidos los consultorios de hoteles, para que los afectados por la enfermedad reciban un tratamiento oportuno, detalló Hidalgo.
Cientos de personas acuden a diario a las salas de emergencia de los hospitales públicos de República Dominicana con los síntomas de la fiebre, pero tardan horas en ser atendidos debido al gran número de pacientes y al escaso personal médico.
El virus de la artritis epidémica chikungunya es transmitido de un persona enferma a una sana por medio de la picadura del mismo mosquito que porta el dengue y provoca prolongadas fiebres con fuertes dolores musculares, en las articulaciones, vómito, diarrea y erupciones en la piel.
La enfermedad no tiene una tasa de mortalidad significativa, pero sí genera un alto nivel de ausentismo laboral y escolar, ya que el dolor impide a los pacientes realizar sus labores cotidianas. En casos graves, los afectados caminan con dificultad y no pueden erguirse.
Lilian Reneau-Vernon, representante de la Organización Panamericana de la Salud, detalló el lunes que desde que se detectó el virus en el Caribe, ya han muerto varias personas en otras islas. Según datos de la esa organización, siete personas murieron por afecciones agravadas por los síntomas la chikungunya en los territorios franceses de Martinica, Guadalupe y Saint Martin.
A diferencia del dengue, los dolores son más intensos con efectos que pueden durar hasta dos años, dijo a The Associated Press la especialista en epidemias virales Jacqueline Medina.
Tras padecer la fiebre chikungunya, los pacientes quedan inmunes a esa enfermedad. El dengue en cambio puede afectar a una persona varias veces en su vida y en caso de dengue hemorrágico, puede provocarle la muerte.
Como ni para el dengue ni para la fiebre chikungunya existen vacunas o medicamentes, el tratamiento para ambos consiste en analgésicos antipiréticos, como el acetaminofén a fin de reducir la fiebre y mitigar los dolores. Las únicas formas de prevenir la enfermedad son evitar las picaduras de los mosquitos y erradicar la proliferación de esos insectos, que se reproducen en depósitos de agua, desde floreros dentro de las casa, hasta grandes tanques.
Técnicos del ministerio de Salud se reunieron con representantes de la asociación de hoteles y turismo a fin de que utilicen el protocolo de prevención y mantengan informados a los viajeros extranjeros sobre la enfermedad.
El ministerio de Turismo aseguró que hasta el lunes, ningún viajero extranjero había presentado los síntomas.
Margarita Cedeño, vicepresidenta dominicana y encargada del gabinete social, anunció el lunes que todas las radiodifusoras comunitarias de su proyecto realizarán campañas de prevención de la enfermedad, además de que 16.000 voluntarios visitarán las casas para orientar a la población y distribuir cloro para verterlo en los tanques de agua.
La enfermedad es frecuente en África y Asia y se registró por primera vez en el Caribe a finales del 2013 en el territorio francés de Saint Martin. En República Dominicana primer caso se reportó a finales de marzo y en el vecino Haití también avanza con velocidad.