Documentos filtrados por Wikileaks provocan peligro


El presidente afgano, Hamid Karzai (D), responde preguntas de periodistas en una conferencia en el Palacio presidencial de Kabul. AFP PHOTO/ Yuri CORTEZ

El presidente afgano, Hamid Karzai, calificó hoy de «irresponsable y escandalosa» la filtración de documentos estadounidenses secretos con los nombres de informadores afganos en el sitio web Wikileaks, afirmando que pone sus vidas en peligro.


«Mi portavoz me dijo ayer que en esos documentos se revelaban los nombres de algunos afganos que cooperan con las fuerzas internacionales», declaró Karzai, interrogado al respecto durante una conferencia de prensa en Kabul.

«Es extremadamente irresponsable y escandaloso porque, independientemente de que esa gente actúe legí­timamente o no al darle informaciones a las fuerzas de la OTAN, se trata de vidas. Y esas vidas están ahora en peligro», denunció.

«Debemos examinar el contexto en el que son mencionados esos nombres, y actuar en consecuencia. Es un asunto muy grave que nos inquieta», añadió el mandatario a propósito de las medidas necesarias para proteger a los afganos que informan a las fuerzas extranjeras arriesgando su vida.

El diario británico The Times dijo que después de sólo dos horas revisando los documentos fue capaz de encontrar decenas de nombres de afganos, que según los archivos informaron en detalle a las fuerzas estadounidenses.

The Times puso a modo de ejemplo un documento de 2008 que incluí­a una entrevista detallada con un combatiente talibán, que se planteaba desertar.

El hombre, que nombra a comandantes talibanes y se refiere a otros desertores potenciales, aparece identificado por su nombre, y también aparecen el de su padre y el de su pueblo. Lo que no se especifica es si finalmente desertó.

En otros documentos, unos afganos facilitan información sobre talibanes. En un informe de 2007, un alto responsable acusa de corrupción a personalidades del gobierno.

Los documentos revelan también los nombres de mediadores, que facilitaron encuentros entre talibanes deseosos de entregar las armas y las fuerzas internacionales. Los lugares de reunión y las fechas también aparecen.

El Pentágono criticó seriamente la publicación, el domingo, de esos archivos secretos sobre la guerra en Afganistán, afirmando que poní­a en peligro la vida de informantes afganos y podí­a perjudicar el trabajo de los servicios secretos.

El presidente estadounidense, Barack Obama, se dijo «inquieto» por la filtración de archivos, susceptible de «amenazar personas u operaciones» sobre el terreno.

El fundador de Wikileaks, Julian Assange, se defendió diciendo que todos los documentos filtrados por su organización fueron examinados previamente, para evitar nombrar a informantes, y que unos 15.000 documentos fueron retenidos.

En una entrevista este jueves con The Times, Assange acusó también a la Casa Blanca de no haber respondido a su solicitud de ayuda para evitar que la publicación por su página de miles de documentos secretos pusiera en peligro a informadores.

Todo documento que «pueda poner claramente en peligro a gente inocente» podrí­a sumarse a los 15.000 documentos que la web ha decidido no publicar, afirmó el fundador de Wikileaks. «Si cometimos un error, vamos a revisar nuestros procedimientos y actuaremos», aseguró.

Los 92.000 documentos filtrados el domingo a la prensa por Wikileaks, un sitio web especializado en inteligencia, dibuja un panorama muy sombrí­o de la guerra en Afganistán, dejando al descubierto la magnitud de las pérdidas civiles y los supuestos ví­nculos entre Pakistán y los insurgentes.