El piloto de un bus fue ultimado por un guardia de seguridad que viajaba como pasajero, en la Calzada Roosevelt y 39 calle de la zona 7. El agente argumentó que habría cometido el crimen para resguardar su vida, pues según él, el piloto intentó acuchillarlo.
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Rolando Riquiac Lares, de 35 años, murió en un bus de la ruta 10; su cadáver quedó en la unidad de transporte que conducía.
Víctor Alfonso Chirix, ayudante de la unidad de transporte, relató que el guardia abordó el bus en El Trébol; se le habría pedido insistentemente que se corriera para atrás, pero se habría negado.
“Le dijimos que se corriera pero no hizo caso, cuando ya se iba a bajar le disparó al choferâ€, dijo el entrevistado.
Al descender del bus, el ayudante, la cuñada del fallecido –que se encontraba cerca del lugar– y otras personas, golpearon al guardia, que después fue consignado por agentes de la Comisaría 14, de la Policía Nacional Civil (PNC).
El detenido es Juan Alberto Ayala López, de 35 años, quien argumentó que cometió el crimen para resguardar su vida, pues el conductor habría intentado agredirlo con un cuchillo.
“Yo le pedí que me parara y no quería. Cuando me bajé discutimos y él sacó un cuchillo que llevaba bajo su asiento, me lo quería poner en el estómago, antes de que me acuchillara yo no lo dejé, fue en defensa propia porque si no él me mata, venía muy violentoâ€, dijo Ayala.
Según el guardia, regresaba de sus labores, trabaja como agente de seguridad privada y tiene licencia para portar el arma de fuego.
CONSECUENCIAS
María Delfina Chamalé, cuñada del conductor, refirió que el fallecido deja a dos niñas de 10 y 14 años en orfandad.
La entrevistada dijo que en esta ruta regularmente hay personas muertas, aparentemente por la ola de violencia.
El detenido por su parte, indicó que también tiene familia –aunque no precisó cuántos hijos- por lo que deben permanecer con su esposa, mientras dilucida su situación jurídica.
“Si no hubiera tomado ese bus, no estaría detenido, todo por haragán, siempre camino pero hoy no quise hacerloâ€, indicó el agente.
Investigaciones de la PNC indican que los asesinatos de pilotos están vinculados a la extorsión de grupos delincuenciales, por riña y problemas en la vía pública, así como por situaciones sentimentales.