Por tener dudas en el financiamiento, el manejo del presupuesto y las funciones del nuevo ente burocrático, el PP no tuvo el suficiente respaldo en el Congreso de la República para entrar a conocer la creación del Ministerio de Desarrollo Social.

En declaraciones hechas ayer por el presidente Otto Pérez Molina, adelantó sobre hallazgos de corrupción y clientelismo en los programas sociales impulsados por el gobierno anterior. Según el mandatario, con esto “queda claro que los programas sociales fueron utilizados para la campaña polí­tica”.

Pero la sombra de los programas sociales, creados durante la administración del ex presidente ílvaro Colom, parece continuar con el nuevo gobierno.

De “clientelares” y con focos de corrupción fueron señalados “Mi Familia Progresa” y “Cohesión Social”, ya que según opositores al partido oficial (2008-2012), fueron utilizados como plataforma electoral.

Ahora, los oficialistas (Partido Patriota) en el Congreso de la República, intentan incluir en la agenda legislativa la aprobación de la ley de creación del Ministerio de Desarrollo Social, la cual tendrá a su cargo administrar estos programas.

Sin embargo, durante la sesión de jefes de bloque celebrada ayer, 10 de 14 jefes manifestaron tener dudas sobre el financiamiento y las funciones del nuevo ente burocrático, pese a los cabildeos que con anterioridad ya habí­a realizado el PP con las otras bancadas que conforman la nueva legislatura.

Jorge Mario Barrios Falla, jefe de la bancada independiente, indica que se necesita un espacio de tiempo para sentarse a analizar bien el contenido punto por punto del espí­ritu de la ley.

“La pena de algunos es que al crearse un nuevo ministerio, a ver si no va a haber duplicidad de funciones con otros ministerios o con otras secretarí­as y el presupuesto con el que va a funcionar y el que van a manejar”.

De acuerdo con el  legislador, lo que se busca es evitar que esto se vuelva “un monstruo burocrático”, como ocurrió con los programas durante la administración recién pasada.

El objetivo es saber cómo el nuevo Ministerio va a manejar los programas sociales, “porque una cosa es cómo van a manejar los programas sociales, y otra es el dinero que tienen que tener para funcionamiento; si no se van a extralimitar, si no va a haber demasiada gente trabajando”, agregó el legislador.

Asimismo, los legisladores esperan que pueda existir el control para fiscalizar los recursos del Estado, tras el análisis y dar algunas recomendaciones, los diputados estarí­an dispuestos a pasar dicha iniciativa “por emergencia nacional”, agregó Jorge Mario Barrios Falla.

A pesar de las dudas de los legisladores, Otto Pérez Molina sostiene que los programas no se eliminarán, sino que serán rediseñados y focalizados, “se va a utilizar el dinero para la gente que verdaderamente lo necesita y no para operaciones polí­ticas como obviamente se estuvo utilizando en la administración anterior”, dijo.

Ante la demora para la creación del Ministerio y que estará a cargo de Lucy Lainfiesta, Otto Pérez Molina indicó que ya el secretario general de la Presidencia está afinando el acuerdo que dará un nombramiento temporal a Lainfiesta, para que ella pueda empezar a trabajar legalmente en esos programas.