Diluir la responsabilidad


Me hubiera gustado haber agregado este comentario a continuación de  uno que leí­ titulado » La Historia de nunca acabar» en el blog de la revista La Razón pues después del gran listado de debilidades que se dieron en él, sin mencionarlo explí­citamente se acusa al gobierno de lo catastrófico que es el sistema de seguridad actual. No lo agregué a continuación de ese comentario pues la letra del blog es muy pequeña y no creo que se entienda mucho lo que uno quiere decir.

Guillermo Castañeda Lee, CUI 1996 53836 1905

Pero el autor de ese comentario no cayó en cuenta de que muchas de las cosas de las que él está acusando al gobierno, éste ya encontró la excusa ideal para decir que no es del todo responsable, sino que es responsabilidad de los curas, de los pastores, del Procurador de los Derechos  Humanos, del Rector de la San Carlos, etc.

En las fotos que salen en los diarios como encargados de diseñar el plan de seguridad, usted encuentra todos estos personajes, pero por más que se busca, no hay ningún experto en esa rama y a la hora de buscar responsables del fracaso, el gobierno los señalará como los responsables, que le impidieron ejecutar sus polí­ticas propias.

Para ponerle la guinda al pastel fabricado para eludir responsabilidades, se nombra a una señora para reorganizar a la Policí­a, así­ que, además de los responsables mencionados, también se agregará a una activista y la farsa se completa.