Dí­a del libro


El próximo miércoles se celebra el Dí­a Internacional del Libro. Esta celebración es fundamental para el mundo de la cultura y la educación, ya que a través de los libros se transmite actualmente los conocimientos y la literatura. Es por ello que la celebración es válida para paí­ses como los nuestros en donde se busca que cada vez más haya más lectores.


Sin embargo, es de analizar que, sobre todo en Guatemala, el libro no es el único modo de lectura. Las cifras, si se miden a través de libros adquiridos, revelan que los guatemaltecos leemos sólo un libro al año. Esto podrí­a ser reevaluado si se toman en cuenta otras formas de llegar a un libro, como el préstamo bibliotecario o con algún conocido, en fotocopias, por Internet, o a través de fragmentos en los periódicos. También, tomar en cuenta las relecturas. Estos modos no son vistos por una estadí­stica que se mide por los libros comprados.

La lectura en Guatemala está muy lejos de ser un negocio. Las quejas del escaso hábito de lectura de la gente, pasa, muchas veces, por lo caro de los libros. Sin embargo, visto desde un librero, los precios no se pueden reducir si no hay un mercado más fuerte. En este cí­rculo vicioso, hemos caí­do, en detrimento de nuestra cultura.

Nos autoconsolamos en nuestra triste situación y no buscamos mejorar; nuestras sociedades actuales están encaminadas a adquirir más conocimientos a través de la televisión, la cual cada vez más está más enfocada en saturar la mente de basura y en ejercitar poco a la mente.

El Dí­a del Libro hay que valorarlo como una celebración de intelectualidad, de quienes gustan ejercitarse la mente a través de la lectura.