Moody’s Investors Service redujo el martes la calificación de la deuda soberana de Irlanda a nivel basura debido a que considera que el país necesitará más rondas de financiamiento cuando el actual apoyo de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional termine en el 2013.
La agencia calificadora degradó los bonos irlandeses de «Baa3» a «Ba1» y dijo que el panorama se mantenía negativo.
Moody’s le dio crédito a Irlanda por su fuerte compromiso con la consolidación fiscal, pero señala que los riesgos de implementación siguen siendo significativos debido a la debilidad de su economía.
Los analistas dijeron que la Unión Europea podría requerir participación de los acreedores del sector privado como condición para un eventual apoyo adicional, lo que resulta en condiciones negativas para los dueños de la deuda gubernamental.
La calificación de emisor de corto plazo de Irlanda también fue reducida en un escalafón, de «Preferencial-3» a «No preferencial».