La Alta Corte de justicia británica declaró hoy que la detención del marroquí Farid Hilali, sospechoso de vínculos con la célula de Al Qaeda en España y con los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, era ilegal.
Los jueces afirmaron que la detención de Hilali, en junio del 2004, por la policía británica, en aplicación de una orden europea de arresto dictada por el juez español Baltasar Garzón, era «ilegal» e injustificada.
Por orden de los jueces británicos Janet Smith y Stephen Irwin, Hilali, de 38 años, será puesto en libertad.