Entre aplausos, poemas, música de marimba y de la banda civil, cientos de vecinos y vecinas de San Agustín Acasaguastlán y de otras localidades, así como las autoridades, rindieron un homenaje póstumo a Lázaro Rodas, destacado compositor maestros de música, fabricante de marimbas e hijo ilustre de la localidad.
El Tío Lacho, como era conocido en el medio, falleció el pasado miércoles a los 92 años; inició como intérprete de música en marimba a los 8 años cuando se integró al conjunto Lira Oriental; a loa 12 se distinguió como compositor de melodías para ese instrumento, en cuyo repertorio se cuenta con aproximadamente 90 melodías.
Para honrar su recuerdo, la banda civil interpretó “Luz Elena”, que el maestro Rodas compuso a solicitud de una maestra con ese nombre; Isabelita, dedicada a su extinta esposa y “Las Gereditas”, inspirada en unas gemelas de apellido Gereda; San Agustín Colonial y los sones, La Olla de Guaytán y Ando Campeando, entre otras.
En 1942 construyó su primera marimba; durante su paso por la Policía Nacional un jefe policial ordenó que todos los cuerpos de ese ente de seguridad contaran con una marimba que los representara.
Ante esa petición, construyó ocho instrumentos, la del Primer Cuerpo de la ciudad capital; la de Zacapa, Cuilapa, Puerto Barrios y Chiquimula; también fabricó para centros educativos en Chiquimula y en la ciudad de Guatemala.
La Niña Tineca fue fabricada a su medida y por su belleza ebanística, sonido e interpretación musical incomparable le mereció el título de Hijo Predilecto en el Paso de Los Jalapas y de San Agustín de la Real Corona; llegó a la cumbre con la fabricación de la India Maya y Guatemarimbas.
Uno de sus últimos deseos, a finales de abril, fue su expresión “no dejen morir el sonido de la marimba”.