Desde la Roma eterna


A pocos dí­as del cumplimiento de los diez años de la firma de la paz, los guatemaltecos se resienten ante los últimos acontecimientos, que ponen de manifiesto la inseguridad en que se vive especialmente en el departamento de Guatemala.

Edith González

Mientras hombres enmascarados incursionan en las fiestas juveniles violando la Constitución y los derechos humanos y atacan a los periodistas, creando pánico especialmente entre la población Los vecinos de Quiché, Alta y Baja Verapaz, lugares duramente golpeados durante la época de la guerra, se ven beneficiados a través del Fondo Internacional de Desarrollo Agrí­cola, FIDA, que desde Roma Italia atiende a estas poblaciones a través del Fondo Nacional para la Paz, FONAPAZ, dirigido por í‰dgar Ajcip.

Un programa de desarrollo humano que en tres años de vida ha demostrado ser exitoso para las comunidades en mención, logrando elevar el nivel de vida, mejorar su situación económica, alimentación y conocimientos sobre salud.

Su esfuerzo y dedicación, les ha llevado a obtener beneficios inimaginables, luego de las duras épocas vividas en los años 80’s la obtención del fruto de su trabajo se ve doblemente premiado ahora, pues Enrique Munguia Opereza, gerente de programas de FIDA, quien visitó recientemente las áreas beneficiadas, además de constatar el éxito del proyecto informó que por su constancia y arrojo para salir adelante, con plena transparencia conquistando sus voluntades y la tierra para convertirla en su aliado productivo, les fueron asignados diez millones de dólares más para el desarrollo de nuevos planes, incluyendo como hasta ahora: producción agrí­cola, producción forestal, desarrollo comunitario, liderazgo, inclusión de género, saneamiento ambiental.

Un proyecto que por su buen desempeño se ha ganado, podrí­amos decir, un premio internacional, que les debe ahora llevar a escalar nuevos niveles de vida.