En cuestión de minutos la Policía Nacional Civil, con orden de juez, desalojó a 300 familias que ocupaban terrenos invadidos desde el pasado 14 de enero en el lugar conocido como asentamiento Sandra de Colom en «Cerro Gordo», San Miguel Petapa. En el lugar hubo presencia de más de 200 agentes del orden público que esperaban el momento para ejecutar la orden. El fiscal del MP a cargo dialogó con los invasores y leyó el documento que autorizaba la acción.
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Ante la negativa de mujeres y hombres, se ordenó la intervención de los agentes los cuales utilizaron bombas de gas lacrimógeno y apresaron a los inconformes, quienes manifestaron no ser delincuentes y sí, personas con necesidad de tierra. Dijeron ser familias que vivían en el lugar desde el 14 de enero cuando las actuales autoridades tomaron posesión del gobierno. La esperanza era conseguir un lugar donde vivir pues el Presidente Colom, cuando fue candidato, pidió el apoyo de toda esta gente, suplicó soporte del pueblo y el voto, pero ahora regresa sólo violencia. Los desalojados expresaron que actuaron por necesidad y en beneficio de sus hijos.
El fiscal de Villa Canales indicó que la acción se llevó a cabo para evitar que la líder, Irma Tamara Pérez, supuesta estafadora, siguiera vendiendo derechos haciéndose pasar por copropietaria de la zona invadida, lo que motivó el desalojo.