Para todos los seres humanos, la vida está llena de altas y bajas, pero cuando las «bajas» duran mucho más o afectan la capacidad para desempeñarse en la rutina diaria, es posible que se tenga una enfermedad común, muy seria denominada depresión. La depresión clínica afecta el estado de ánimo, la situación mental y física, de la persona y su comportamiento. La mayor parte de personas no solicitan ayuda. Con tratamiento terapéutico y farmacológico se alivian los síntomas en más de un 80% de los casos, sin embargo, como a menudo pasa desapercibido, este trastorno sigue ganando terreno.
La depresión es una enfermedad limitante, incapacita a la persona. Se presenta tanto en mujeres como en varones, pero la tasa de incidencia en la mujer es casi el doble que en el hombre. Actualmente, se siguen realizando estudios para investigar si las características de la mujer y sus factores biológicos, el ciclo de vida o aspectos psicosociales pueden ser causas de la frecuencia de depresión en las mujeres.
La depresión afecta a cada persona de diferente manera. Muchas personas solamente manifiestan algunos de los síntomas, los que pueden variar en intensidad y duración. Para algunos, los síntomas se manifiestan en períodos cortos; para otros, los síntomas pueden durar mucho tiempo si no se obtiene el tratamiento adecuado. Tener algunos síntomas de depresión no significa que una persona está deprimida clínicamente. Por ejemplo, es normal que quien haya perdido un ser querido se sienta triste y pierda interés en realizar actividades diarias.
Si estos síntomas persisten por un período largo posterior a un año, entonces se puede pensar que la tristeza se ha convertido en depresión. De igual manera, vivir con el estrés de la posibilidad de perder el empleo, demasiado trabajo, problemas económicos o familiares, puede causar irritabilidad y «bajas» en el estado de ánimo. Aunque en nuestra sociedad guatemalteca el sentirse así está entre los límites normales. Pero si la persona se siente así por mucho tiempo y con mayor intensidad, y presenta inestabilidad en su vida diaria, entonces, no es sólo un estado de ánimo, se afirma que es un estado patológico de depresión clínica, que necesita orientación profesional.