Los demócratas respondieron al discurso sobre el estado de la Unión del presidente George W. Bush, en el que justificó el martes su decisión de enviar más soldados a Irak, con la exigencia de que inicie un retiro de las tropas formulada en inglés y por primera vez también en español.
«Este país padeció con paciencia una guerra mal manejada desde hace casi cuatro años», afirmó el senador demócrata Jim Webb (Virginia), encargado por su partido de dar la tradicional réplica al presidente en inglés después de su discurso anual al Congreso.
«Necesitamos un nuevo rumbo. No un paso atrás en la guerra antiterrorista. Tampoco una retirada precipitada que ignore la posibilidad de un futuro caos, sino un cambio inmediato hacia una diplomacia fuerte en la región, una política que retire a nuestros soldados de las calles de Irak y una fórmula que permita a nuestras tropas dejar rápidamente a Irak», explicó.
Por primera vez, los demócratas también respondieron al presidente en español, el idioma de la creciente comunidad hispana, la minoría más importante del país con cerca de 45 millones de personas y un peso electoral que podría ser determinante en las presidenciales de 2008 en estados como Florida o Nuevo México.
El encargado de replicar en castellano fue Xavier Becerra, el representante demócrata de California, una de las estrellas hispanas del Partido Demócrata, que ha sido designado a principios de mes adjunto de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
«Ya es tiempo de que el presidente escuche el pueblo estadounidense, sus generales y un creciente número de líderes demócratas y republicanos. Es hora de que hablemos de retirar a nuestras tropas de Irak, no mandar más», afirmó el congresista.
«Los demócratas creemos que podemos retirar nuestras tropas de manera responsable, que podemos seguir entrenando a los iraquíes y que podemos, entonces, reenfocar nuestros esfuerzos en el contraterrorismo. Pero tenemos que incluir a los países vecinos de Irak en el proceso de estabilizar el país», dijo.
En cambio, los demócratas si vieron con buenos ojos el llamado del presidente al Congreso a aprobar una reforma migratoria que abra el paso a la regularización de millones de indocumentados radicados actualmente en Estados Unidos.
En inglés, el veterano senador Ted Kennedy, que lideró los esfuerzos por la reforma el pasado año, se congratuló por la decisión de Bush, aunque también le pidió que «mantenga sus esfuerzos con los miembros de su partido para que podamos aprobar una ley que resuelva el problema de una vez por todas».
En español, Becerra dijo que «después de años de ataques e inacción por parte de los republicanos, los demócratas estamos listos para liderar. Pero para tener éxito, necesitamos el apoyo del Presidente y estamos listos para trabajar con él», aseguró.
El pasado viernes, el senador demócrata de Colorado Ken Salazar había ofrecido la primera conferencia de prensa exclusivamente en español de parte de un congresista estadounidense en el Capitolio, para adelantar a la prensa la posición del partido antes del discurso de Bush.
«Es importante que la comunidad latina pueda entender lo que está pasando aquí en este edificio y que afecta sus vidas en tan gran manera», explicó el congresista, al explicar las razones que llevaron su partido a hablar en español antes y después del discurso sobre el estado de la Unión.