Sin duda que el problema estriba en la falta de oportunidades para la participación pública en la toma de decisiones ambientales en la región, como respuesta a los retos que presenta el contexto actual. Preocupa la exploración petrolera en el Caribe costarricense y la puesta en marcha del proyecto hidroeléctrico en el rí­o Usumacinta en Guatemala, además de otros proyectos que podrí­an tener gran envergadura, pues podrí­an tener impactos dramáticos en los ecosistemas en donde se planea desarrollarlos.

Se ha insistido en que el Principio 10, de la Cumbre de Rí­o, marca un referente de suma importancia en la lucha por la defensa del medio ambiente y el desarrollo sostenible. Los gobiernos centroamericanos han ratificado este importante compromiso, así­ como muchos otros acuerdos de especial relevancia en materia ambiental, sin embargo, se carece de un marco legal que asegure y norme la participación ciudadana en la región de los recursos ambientales en la región.

En una investigación encabezada por la Red de Formación e Investigación Ambiental (REDFIA), se plantea que en Guatemala es urgente fortalecer y desarrollar capacidades que faciliten la difusión veraz y comprensible de los parámetros de calidad ambiental, las regulaciones legales establecidas y los derechos y deberes ciudadanos en la materia, estimulando una participación pública eficaz que fortalezca la gestión ambiental, exija el cumplimiento legal e incida en la formulación de polí­ticas públicas.

Asimismo, difundir y divulgar los mecanismos legales de participación establecidos, dirigidos a todos los sectores especialmente a los rurales e indí­genas y dar a conocer la existencia del derecho a la organización y alianzas comunitarias, motivando y apoyando la participación de la sociedad civil en la gestión de los recursos naturales y el mantenimiento de la calidad ambiental.

Las conclusiones y recomendaciones del estudio, al igual que otros surgidos en Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica fueron planteadas en una reunión sostenida en la capital costarricense a finales del año pasado.

Sin duda que los académicos y la sociedad civil centroamericana insistirán, en el transcurso del presente año que los gobiernos apliquen a cabalidad el Principio 10.

* Añoré los silbadores.- El año pasado tomé ponche y comí­ tamal, pero antes, durante y después de la Navidad, me hizo falta el sonido de los silbadores.

* Guarales.- Según las estadí­sticas, no oficiales, a fin de año hubo un considerable incremento de consumo de alcohol. Ni modo, con el bono navideño los muchachos se desbordan en «chupar» en un mes lo que no hacen durante los 11 previos al jolgorio navideño.

* No más extranjeros.- Estoy en contra de que los equipos de la mayor contraten a cuatro extranjeros. Lo conveniente es que se dé oportunidad a los chapines. Los extranjeros sólo se llevan los dólares y no dejan nada de experiencia a los nacionales.