La diputada del Partido Patriota, Anabella de León presentó ante las autoridades del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), y el contralor de Cuentas, Carlos Mencos, varias denuncias relacionadas a las deficiencias observadas en los centros asistenciales de ese ente.
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Entre los señalamientos están la investigación de contratos de compra de combustible, por lo que se pidió un informe y copia de los contratos suscritos para su adquisición.
También están las quejas de los pilotos de las ambulancias del IGSS que indican que las mismas se encuentran en malas condiciones.
Al mismo tiempo, la parlamentaria indicó que se constató la veracidad de una denuncia en contra del Jefe de la Dirección General de Transporte del IGSS, ya que, al parecer, en esa unidad se han desmantelado varios vehículos.
Además, se busca conocer la atención de los mil 500 pacientes renales, sobre todo por la participación de hospitales privados a nivel nacional en la prestación del servicio.
«Quedamos en que nos enviarán los contratos en un tiempo mínimo, esperamos contar con ellos para poder hacer nuestras investigaciones. Además, haremos visitas constantes, para determinar la calidad del servicio», dijo De León.
De acuerdo a la congresista, las autoridades del IGSS negaron las denuncias entre las que destacó que se adquieren vehículos para uso particular en lugar de adquirir ambulancias; reparación de cinco vehículos con un costo de más de 40 mil quetzales y que se quedaran en poder de las autoridades; ambulancias que posee el IGSS se encuentran en muy mal estado, lo que ya ha provocado varios incidentes cuando transportan a pacientes y se han reportado casos en los que los afiliados han estado en peligro de muerte.