Debate sobre caza de ballenas


Trece naciones latinoamericanas culminarán el jueves un cónclave destinado a unificar posiciones sobre la caza de ballenas en el mundo, en un intento por llevar una voz única de la región a la conferencia internacional que decidirá el próximo mes el futuro de estos animales.


Esta reunión latinoamericana iniciada el martes en Costa Rica es previa a la 62ª conferencia de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), que se realizará en junio en Agadir, Marruecos, y que debe resolver una propuesta destinada a reducir la caza de cetáceos, que es cuestionada por grupos conservacionistas.

«Yo creo que al momento que lleguemos a Agadir vamos a llegar en una etapa de negociación y ahí­ hay que ver si los paí­ses están en condiciones de llegar a un resultado y si eso es vendible a nivel interno y no estén demasiado cazados por su retórica», dijo el presidente de la CBI, Cristián Marquieira..

Veinticinco entidades ecologistas rechazaron esta semana el plan, diseñado por encargo de Marquieira, quien lo analizó el miércoles con los comisionados balleneros de 13 paí­ses de América Latina aglutinados en el llamado Grupo de Buenos Aires, que se opone a la caza de los cetáceos.

Marquieira admitió que la propuesta legitima «la cacerí­a de la ballena», que es defendida por Japón, Islandia y Noruega, pero destacó que reduce en 400 al año las cifras de capturas, que ahora bordean las 2.000.

«Si se bajan (las capturas) pueden ser entre 4.000 y 5.000 ballenas que queden en el mar» en los próximos 10 años, dijo Marquieira, quien es chileno.

Asimismo, manifestó su confianza en que se logrará un acuerdo en Marruecos que ponga fin a los enfrentamientos dentro de la CBI entre los paí­ses que apoyan la caza de cetáceos (Japón, Islandia y Noruega) y los que quieren prohibirla completamente (Australia y las naciones latinoamericanas).

La Comisión, fundada en 1946, está paralizada por disputas entre los paí­ses cazadores, que juzgan exageradas las amenazas que pesan sobre estos animales, y los protectores, que exigen mantener la moratoria vigente desde 1986.

«Yo creo que estamos condenados al éxito, a lo mejor me equivoco, y esta propuesta es muy prematura y los paí­ses no están todaví­a preparados para vender internamente una fórmula de esta naturaleza», expresó Marquieira.

Las 25 entidades ecologistas rechazaron esta propuesta, que fue presentada en abril, diciendo que implicarí­a levantar la moratoria a la caza de ballenas, pero Marquieira afirmó que «la caza de la ballena no se ha interrumpido nunca» y desde que fue aprobada la moratoria han sido capturadas unas 30.000.

Marquieira dijo que esta propuesta es una base para negociar, por lo que las cifras de capturas pueden ser reducidas en Marruecos, aunque difí­cilmente elevadas.

«Todo el mundo sabe, desde Japón hasta nosotros, que una solución que aumente esos números es impresentable. Esa propuesta va a ser negociada (en Marruecos) y los números van a tener que bajar», expresó.

Las últimas dos jornadas de la cita de comisionados balleneros de América Latina se desarrollaron a puertas cerradas, pero los organizadores prometieron anunciar los acuerdos en conferencia de prensa.

A la cita del Grupo de Buenos Aires y paí­ses observadores asistieron delegados de Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, El Salvador, Honduras, México, Panamá, Perú, República Dominicana y Uruguay.