“Tal es la condición de la miseria humana, que el dolor es su sentimiento más vivo” Jean Le R. d´Alembert
Creo que el gobierno lanza nuevamente al aire “información” y algunos caen en el juego, aunque otros previamente están pactados, para seguir con el movimiento mediático, discutiendo temas que no se pueden llevar a cabo, intrascendentes, comparados con la mayoría que nos aqueja, pero se cumple el objetivo, crear cortinas de humo, para no debatir sobre los problemas principales del país, por lo que considero no se debe caer en esa maliciosa distracción, y tratar los temas importantes, los superfluos dejarlos de lado.
¿Por qué lo anterior? Si sabemos perfectamente que la ley no tiene efecto retroactivo, lo establece la Constitución y leyes ordinarias, ¿Por qué ocupar tantas páginas por un supuesto aumento al mandato constitucional de 2 años más? No cabe duda que todavía nos engañan con espejitos, los problemas de fondo, son los que deben salir a debate, y tratar de encontrar soluciones, pero nos perdemos en el humo que nos lanzan.
Veamos, aprueban constantemente nuevos préstamos millonarios en dólares, por lo que el endeudamiento eterno desmesurado que vivimos, crece más cada día, préstamos van, préstamos vienen, y los intereses que pagamos cada año superan más millardos, hasta que lleguemos a la fatal fecha, en que la mitad del presupuesto de egresos sea para pagar intereses, de préstamos de los que no sabemos en qué se han utilizado, o donde se encuentra el dinero producto de los mismos, pero a pocas personas les interesa, en el fondo el endeudamiento público, parece que no nos afectara en nada, pero nos empobrece cada día más.
Por otro lado, las cifras de muertos cada día van en aumento, la espiral de violencia es imparable, solamente en los primeros cinco meses del año han muerto desmembradas 17 personas, hombres y mujeres, que previamente habían sido secuestrados, se dice que el conflicto armado terminó, pero dejó profundas huellas, y no solamente la división ideológica, dejó algo peor, la costumbre a ver el dolor ajeno sin inmutarse, porque en pleno siglo XXI, en Guatemala, como en cualquier país del mundo que vive un conflicto actualmente, se sigue aplicando uno de los crímenes de lesa humanidad como la tortura, y aquí no ha pasado nada ¿Quién responde por los muertos? Seguramente responderán que son cuentas pendientes del crimen organizado.
En el mismo contexto de descomposición solapada que vive el país, el IGSS, que nació como una institución noble, a la fecha no hay semana que no leamos noticias sobre manejos oscuros en esta institución, como ejemplo, la noticia aparecida el 29 de mayo en PL, para comprar metfomina, se fraccionó en 30 compras que ascienden a más de 27 millones y medio de quetzales, mientras no hay camas ni medicinas, además de pagarle sueldos miserables a los médicos,
Temas para discutir existen más de los deseados, Guatemala se hunde cada día más, pero nos perdemos en debates inútiles ¿O útiles para crear cortinas de humo y alejarnos de lo verdaderamente importante? ¿A quién favorece que veamos las hojas y no el árbol? Creo que deberíamos ser más cuidadosos en los temas que son verdaderamente relevantes para el país, y separarlos de los que solamente sirven para levantar espuma que igual de rápido cae.
Preocupa que, con el dinero de nuestros impuestos, la SAT alquiló por US$4.1 millones seis pisos en el edificio Dubai Center, bien podrían modificar la Ley Orgánica de esta institución, o regresar sus funciones al Ministerio de Finanzas Públicas, lo que conllevaría un aumento considerable en el presupuesto de ingresos, que hacen mucha falta para educación, salud y seguridad, pero acá todo se hace con los pies, y sin que sea aún el Mundial nos meten goles todos los días. Esa es nuestra realidad