Continúan los espacios pagados por los distribuidores del gas licuado para uso doméstico, en los cuales cada quien dice estar en lo cierto en relación, no sólo en lo relacionado al peso exacto, sino también a la propiedad de los cilindros.
Hoy, se puede decir que el peso exacto mejoró, después de una multa aplicable a una distribuidora; eso se puede notar a simple peso, pues los cilindros eran un poco livianos, y en cambio ahora, cuesta un poco más levantarlos. Me refiero a los envases de 25 libras por ser los más populares.
Pero con la propiedad de envase es otro cantar. Muchos, no de ahora sino desde hace años se dejaba un depósito para su uso, que consistía en la cantidad de CINCO QUETZALES, tengo el recibo correspondiente. A cambio le daban un tambo nuevo, limpio y reluciente. En la actualidad no se cómo estará eso, si continúan los depósitos, que no generan utilidad económica para el depositante, o si únicamente se venden.
Como dejo dicho, ese cilindro se recibía hasta chapudo, se solicitaba otro, aún se hace, y el que llevan está abollado, lastimado, porque el manipuleo cuesta más, y los vacíos, lo he visto, es natural que los tiren desde abajo para adentro del camión que los transporta. No los van a cargar entre algodones, por supuesto. Ya en oportunidad anterior, desde esta mis Butaca sugerí que cada ama de casa limpiara el cilindro chorreado que le entregan, pero no se hace.
Lo ideal sería que cada tambo-habiente pudiera ir a la envasadora para que le llenaran el nuevo, y así poder conservarlo en buen estado. Esto lo pueden hacer, y sé que algunos que tienen vehículo propio lo hacen, no importa el tamaño del envase. Pero la «pobrería» que carece de su carrito, si dispone llevarlo en taxi, le sube el costo.
El asunto, pues, es complejo porque aparte está a quién se culpa de ese deterioro. En cuanto a que unas distribuidoras reciben cilindros de otras, también tiene su belén, porque no todos están pintados con un color distintivo ni marca. Al aplicar este sistema se podría mejorar la situación. Primero: pedir el gas sólo a su proveedor preferido: «soñando», y que cada distribuidora de acuerdo a color y marca lo intercambiara por los suyos correspondientes. Difícil, pero no imposible. Querer es poder, se deja dicho.
GOTITA: Leí que un jugador de beis hizo JON RON. La palabra es: «home run». Algunos choferes que provocan accidentes también hacen su «jon ron».