Da Costa dirigirá a Marquense


Francisco Melgar abandona la nave del Marquense por los malos resultados en los últimos partidos.

En sustitución de Francisco Melgar, el brasileño Luis Da Costa será el nuevo técnico que dirigirá los senderos del Deportivo Marquense a partir de mañana cuando «los leones» disputen la novena jornada del Torneo Clausura 2008 ante Xelajú MC.

Juan Garcí­a
jgdeportes@lahora.com.gt

El arribo del brasileño al paí­s se podrí­a dar esta misma noche para estar mañana en el encuentro ante «los chivos» del Xelajú en el estadio Marquesa de la Ensenada a partir de las 20:00 horas.

Ya antes Da Costa ha dirigido a varios equipos guatemaltecos, entre ellos el mismo Xelajú MC, Zacapa y Teculután.

«Todo salió bien (en la negociación) y estaré viajando a primera hora del viernes a Guatemala porque espero estar en el banquillo de una vez, pero depende de cómo se van a manejar las cosas porque quiero dirigir el sábado contra Xelajú, que es el clásico de esa región», dijo Da Costa a una radioemisora local desde Brasil, según AFP.

Según informaron ayer fuentes del equipo, Francisco Melgar dejó la dirección técnica de «los felinos» debido a los malos resultados del equipo en los últimos partidos del Torneo Clausura, ya que en la tabla acumulada suman 32 puntos, en tanto que en la tabla general lo hacen en la séptima casilla con 8 puntos.

Melgar anunció su salida hace dos semanas por los malos resultados, pues Marquense marcha en el séptimo lugar de diez equipos, con tan solo ocho puntos en las ocho jornadas disputadas hasta el momento.

No obstante, Melgar tuvo una racha positiva con ese club, toda vez que logró dos subcampeonatos y un tercer lugar en el torneo interclubes de la Unión Centroamericana de Fútbol (Uncaf), lo que le valió participar por primera vez en la Concacaf, donde fue eliminado por el Pachuca de México.

Al momento, el resto del cuerpo técnico que estuvo trabajando con Melgar no sufrirá de ningún cambio, por lo que David Gardiner seguirá como subentrenador y Javier Sosa como preparador fí­sico.