Las tensiones en torno a las reglas del comercio mundial centrarán la cumbre anual Asia-Pacífico que se inicia el próximo fin de semana en Hanoi, en presencia de un debilitado presidente estadounidense George W. Bush tras la victoria demócrata en las elecciones legislativas.
Los 21 miembros del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) también abordarán las incertidumbres que generan a largo plazo los recursos energéticos, la lucha contra el terrorismo y la proliferación nuclear, en especial el caso norcoreano.
Además de Bush, los presidentes Vladimir Putin de Rusia y Hu Jintao de China, así como el primer ministro japonés Shinzo Abe, participan en esta cumbre, el sábado y domingo en la capital de un Vietnam en pleno desarrollo económico, y que acaba de recibir luz verde para ingresar en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Los presidentes de Perú y Chile, Alan García y Michelle Bachelet, respectivamente, también tienen previsto asistir a la cumbre. Los diputados mexicanos denegaron en cambio al presidente de México, Vicente Fox, un permiso para viajar a Vietnam.
Bush y Putin, que ya se habrán entrevistado el miércoles en Moscú, volverán a verse el domingo en Hanoi, días después de que sus países suscribieran un acuerdo bilateral de principio para la entrada de Rusia en la OMC. Rusia y Estados Unidos esperan firmar este acuerdo en Hanoi, al margen de la cumbre.
Por su parte, China aprovechará el foro para reafirmar su supremacía en Asia y sus crecientes ambiciones en el mundo.
Además, el futuro del programa nuclear norcoreano, tras el ensayo del 9 de octubre, debe centrar las entrevistas bilaterales entre Bush y Abe.
Japón expresó el deseo de que los dirigentes de la APEC envíen un mensaje «firme y conjunto» a Corea del Norte, pero en cambio el gobierno chino -satisfecho por la reanudación de negociaciones multipartitas (Estados Unidos, China, Rusia, Japón y las dos Coreas)- rehusará sin duda que el programa nuclear norcoreano sea objeto de una declaración distinta en Hanoi, según los delegados.
En lo que respecta al comercio mundial, los 21 miembros de la APEC debatirán la hipotética reanudación de las negociaciones de la Ronda de Doha, en el seno de la OMC, cuyo objetivo es reducir las barreras aduaneras. Esas negociaciones están paralizadas desde julio pasado, debido a profundos desacuerdos entre estadounidenses, europeos y países en desarrollo.
La cumbre de la APEC podría adoptar una declaración conjunta instando a reactivar la Ronda de Doha.
China considera que Estados Unidos y la Unión Europea (UE) deben tomar la iniciativa y hacer las primeras concesiones para salvar las negociaciones de la Ronda de Doha, aseguró hoy en Hanoi una fuente diplomática.
«Hay acuerdo para reactivar de inmediato la Ronda de Doha. Pero hay desacuerdo sobre el hecho de que los países en desarrollo, principalmente China, quieren que los ’grandes’ tomen la iniciativa y hagan concesiones» indicó un delegado asiático que participa en sesiones preparatorias a la cumbre.
Por otro lado, en Estados Unidos numerosos demócratas son hostiles al esfuerzo del presidente Bush de reducir las barreras comerciales.
Esta es la primera visita de Bush a Vietnam, más de 30 años después del fin de la guerra entre ambos países. Se produce pocos días después de la clara derrota de los republicanos en las legislativas del 7 de noviembre, causada por el repudio que suscita ahora entre los electores la política de Estados Unidos en Irak.
La cumbre de la APEC se celebrará en un complejo especialmente construido por las autoridades vietnamitas que costó 268 millones de dólares.
Además de sus tres miembros latinoamericanos –Chile, México y Perú– integran el Foro de APEC Australia, Brunei, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Hong Kong, Indonesia, Japón, Malasia, Nueva Zelanda, Papuasia-Nueva Guinea, Filipinas, Rusia, Singapur, Taiwán, Tailandia y Vietnam.