El Gobierno de Raúl Castro se mostró prudente al informar hoy sobre el levantamiento de las sanciones de la Unión Europea (UE) contra Cuba, que calificó de «injustas» y fueron impuestas tras el arresto de «contrarrevolucionarios, pagados y avalados» por Estados Unidos.
Una nota elaborada sobre informaciones de agencias internacionales fue publicada en Granma y Juventud Rebelde -los diarios nacionales- sin mayores comentarios o apreciaciones por la decisión.
«Habrá que ver más detalles para tener más valoraciones de esta decisión», dijo el diputado Randy Alonso, quien dirige el programa oficial «Mesa Redonda», que se transmite por todas las cadenas de televisión y varias radiales.
Los cancilleres de la UE decidieron ayer levantar las sanciones contra Cuba, tomadas en 2003 y suspendidas en 2005, así como el establecimiento de un diálogo político, ya en vigor entre Madrid y La Habana.
«Las injustas medidas de la UE fueron impuestas en el 2003 bajo el pretexto del arresto, por parte de Cuba, de 75 contrarrevolucionarios, pagados y avalados por el gobierno de EE.UU. para subvertir el orden político, económico y social de la Isla», afirmó la nota publicada en la prensa.
Cuba había exigido el levantamiento total de las medidas -corte de la cooperación cultural, suspensión de visitas de alto nivel e invitación a los disidentes a embajadas en fiestas patrias-, a la vez que reprochaba al bloque falta de independencia política frente a Estados Unidos.
Washington y la disidencia interna rechazaron la decisión europea argumentando que aún quedan 55 de los 75 reos en prisión y que constituye un espaldarazo al Gobierno cubano, que puede desacelerar o frenar las reformas en curso.
El comunicado cubano también dijo que la Posición Común (unánime) adoptada en 1996 por la UE en su política hacia la isla «ha devenido instrumento injerencista en los asuntos internos de Cuba».
El texto subrayó que la reacción desde Washington fue de «decepción».
Primera sesión
El Parlamento cubano celebrará el 11 de julio su primera sesión de trabajo bajo el gobierno de Raúl Castro, según la convocatoria de su presidente, Ricardo Alarcón, publicada este viernes.
Electos en enero, los 614 diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) tuvieron su sesión constitutiva el 24 de febrero, en la que se eligió al Consejo de Estado, de 31 miembros, que desde entonces preside Raúl Castro, tras la declinación de su hermano Fidel a la reelección.
Fidel Castro, de 81 años, es uno de los 614 diputados electos, pero no asiste a las reuniones por sus limitaciones de salud, en una convalecencia que ya dura 23 meses.
Funcionarios de la ANPP dijeron que la agenda de la reunión aún no está finalizada, pero que rendirá cuentas el Ministerio de la Industria Sidero-Mecánica, y se ratificarán 12 Comisiones Permanentes, creadas para atender temas de la salud, defensa, ciencia, economía, agricultura, energía y ambiente.
Se espera que el Parlamento sancione las medidas tomadas en la agricultura para aprobar la producción de alimentos, declarada tema de alta seguridad nacional, y trate modificaciones al régimen migratorio.
No se descarta que la actual legislatura, que tiene un mandato de cinco años, apruebe alguna medida de la serie de cambios sociales y económicos que lleva a cabo Raúl Castro.
El Parlamento unicameral cubano tiene una edad promedio de 49 años, el 61% de sus miembros nació después del triunfo de la revolución en 1959, y tuvo una renovación del 63,5% frente a la legislatura anterior, aunque la mayoría de los dirigentes históricos permanecen en él.
La política española hacia Cuba -al origen del levantamiento de las sanciones de la UE contra la isla- no afectará las futuras relaciones entre el Gobierno español y el próximo presidente de Estados Unidos, aseguró la socialista Elena Valenciano, al concluir hoy una visita a Washington.
«No lo creo», afirmó la secretaria de Relaciones Internacionales del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Elena Valenciano, al ser consultada sobre si Cuba podría ser un obstáculo para mejorar las relaciones entre España y Estados Unidos, cuando el próximo presidente se instale en enero en la Casa Blanca.
«Yo creo que la política española hacia Cuba empieza a ser en gran medida la política de la UE», añadió la responsable del partido del presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, que se reunió en Washington con asesores de los dos candidatos, el republicano John McCain y el demócrata Barack Obama.
«Por lo tanto, creo que del lado de Estados Unidos también tiene que haber una nueva mirada hacia la isla. No se puede mirar las cosas de la misma manera porque las cosas están cambiado», añadió, después de que el Departamento de Estado confesara su malestar, horas antes de que la UE tomara su decisión.
Los ministros de Exteriores de la UE acordaron el jueves por la noche en la cumbre europea de Bruselas el levantamiento de las sanciones contra Cuba y la reactivación del diálogo político con el régimen comunista, un giro impulsado por España tras cinco años de asperezas.