Dentro de 4 días y algunas horas, el mundo se enterará de quién es el nuevo presidente de los gringos: Mitt Romney (Republicano) o Barack Obama (Demócrata en busca de su segundo período).
Aunque los Estados Unidos, no tiene el mismo poder de hace 20 años, por el crecimiento financiero y tecnológico,
Sin olvidar lo relacionado con el armamento, de Rusia, con Putin, a quien algunos consideran la reencarnación de Stalin y de China Continental con un comité del Partido Comunista fuerte y poderoso como no se veía desde la muerte de Mao Tse-tung, el país del norte sigue teniendo una influencia enorme en casi todos los países del orbe y con mayor razón en Latinoamérica.
Obviamente, Estados Unidos ha tenido en estos últimos 10 años que enfrentar dos retos que no conocía tan de cerca, un terrorismo impulsado por países árabes que los despertó trágicamente con el atentado a las torres gemelas y por otra parte, sufrir una crisis económica que casi llega a la depresión de los años 30 que debilitó incluso a la Unión Europea que se estaba convirtiendo en un gigante para disputarle a sus colegas muchos primeros lugares, mientras que China (la comunista), pasó en poco tiempo a colocarse en el segundo lugar de potencia financiera mundial después de sus eternos rivales a quienes seguramente sobrepasará en menos de 3 años.
Este es a grandes rasgos el escenario mundial que a nivel de los grandes espera a Estados Unidos en las cercanas elecciones. En Latinoamérica al menos no creo que se animen a volver a hacer invasiones como las de Guatemala, Granada, Santo Domingo, Panamá, etcétera, fuera de tener (creo que también por primera vez) a opositores, incluso arrogantes como Hugo Chávez, quien irá por un nuevo período si el cáncer no dispone otra cosa; Rafael Correa, en Ecuador; Evo Morales en Bolivia; Christina Kichtner en Argentina; Daniel Ortega en Nicaragua y por supuesto Cuba en el caribe, con cambios de mando y de actitudes.
Según las encuestas realizadas, se habla mucho de un “empate técnico”, sin embargo, en mi opinión personal creo que Obama volverá a ganar pese a lo decepcionante de su gobierno para los afroamericanos y sobre todo para nuestros compatriotas hispanos que esperaban más de él para ayudarlos a solventar su situación migratoria y mejorar las condiciones sociales de los que ya tienen un status seguro en materia de ciudadanía y/o residencia. Pero como buenos latinos pensarán que del mal el menos y que más vale lo viejo conocido que lo nuevo por conocer, aún a sabiendas que Obama, asegurado su segundo mandato GRACIAS al voto de los hispanos y los afroamericanos, no hará nada para cambiar la situación de los que le darán el triunfo pese a lo admirable de un grupo de millonarios que PIDIERON que les cobraran más impuestos para ayudar a los más necesitados (igualito a los millonarios de Guatemala).
De todas formas los republicanos se acercan más a la presidencia y después de los próximos 4 años llegará uno de ellos a la Casa Blanca, aunque espero no sea tan “inteligente” como Bush hijo, ni tan radical como los que ya hemos conocido.
El gobernante gringo debe ver los errores de la historia y no volver a cometerlos como el caso de Corea, que creyéndose siempre la “nación más poderosa del mundo”, dividió esa nación en dos, una comunista y otra pro gringa; igual que en Vietnam donde les cayó barniz parejo o en Irak, Siria, Yemen, Afganistán y otros que son centros de operaciones contra los Estados Unidos.
Ahora las cosas no son fáciles ¿Se acuerdan de Bahía de Cochinos, de los más de 600 intentos de asesinar a Castro, quien morirá cuando le dé la gana y ahora, la reelección del agresivo Chávez? Va pues, para que vean….