Colombia no logrará la paz con la insurgencia por la vía militar ni siquiera con el apoyo de Estados Unidos, opinó el martes el dirigente opositor colombiano Carlos Gaviria, que se remitió a lo que ocurre en Irak, donde hasta la geografía es más accesible que la selva colombiana.
«Hace más de tres años, tres ciudadanos norteamericanos están en poder de la guerrilla y con la tecnología norteamericana puesta al servicio de ese rescate, no ha sido posible. ¿Qué tan cerca estará entonces el triunfo militar sobre la guerrilla?», se preguntó Gaviria, ex candidato a la presidencia por el Polo Democrático Alternativo (PDA, izquierda).
Gaviria, candidato a la presidencia de Colombia en los comicios de mayo de 2006 en los que quedó en segundo lugar con el 22,04% de los votos, hizo entonces una reflexión con lo que ocurre en Irak, justo el día en que se cumple el cuarto aniversario del comienzo de la invasión estadounidense, que hundió a ese país en una espiral de violencia, con un balance de muertos que va de 63.500 -incluidos 3.220 soldados norteamericanos- a 650.000, en su inmensa mayoría civiles iraquíes.
«La guerra de Irak la dan por perdida y qué distinta es la geografía de Irak con respecto a la colombiana?. ¿Cuánto tiempo lleva la guerrilla colombiana y cuánto tiempo combatiéndola?, volvió a interrogarse Gaviria, que habló sobre la situación en su país durante un encuentro en la madrileña Casa de América.
«Y ahora el Plan Colombia, el Plan Patriota, decididamente encaminado a la derrota de la guerrilla (…) y por tanto yo podría anunciarles que durante este segundo cuatrienio del doctor Uribe tampoco se va a lograr la paz por esa vía pero eso si, toda la atención de la gente estará en la derrota de la insurgencia por la vía militar y no en las reformas que la sociedad colombiana necesita».
Desde el año 2000, Estados Unidos aportó más de 3.600 millones de dólares al denominado Plan Colombia, concebido para luchar contra el narcotráfico y ampliado el año pasado a la lucha contra los grupos armados ilegales.
El proyecto de presupuesto de la administración de George W. Bush para 2008 prevé ampliar dicho plan, pese a que no todos los observadores consideran que sus resultados sean positivos.
«Uribe decidió la derrota militar de la insurgencia», opinó Gaviria, para quien el problema del gobierno es que «si se admite la existencia de un conflicto, hay que buscar las causas» que él ubica en la pobreza que afecta al 60% de la población, la miseria que alcanza al 25% y la desigualdad en la redistribución de la riqueza.
Por eso consideró que en Colombia «hay que hacer reformas sociales que entiendan las raíces del mal» pues «la insurgencia no va a ser derrotada con las armas», insistió. «Si se resuelve el conflicto, volvería en cierto tiempo porque no se están resolviendo las causas», sostuvo, antes de aclarar que no es «iluso» y sabe que el Estado «tiene el derecho y el deber de ejercitar la fuerza».
En este contexto, Gaviria criticó duramente la política de seguridad democrática aplicada por Uribe que «con la habilidad que lo caracteriza, tomó ese nombre para encubrir su política de seguridad nacional» que en los años 80 «dio lugar a todos los excesos» en materia de violación a los derechos humanos.
Senador, magistrado de la Corte Constitucional y reconocido académico, Gaviria fustigó igualmente a los terratenientes que son quienes respaldan a Uribe y consideran «un éxito» la política de seguridad democrática porque «pueden ir a sus fincas los fines de semana».
Más de 70.000 muertos, en su mayoría civiles y más de tres millones de desplazados, ha dejado la violencia en Colombia en los últimos 20 años, según Amnistía Internacional.
Según Gaviria, la reciente visita a su país del presidente Bush puso en evidencia una vez más el fracaso de la política de seguridad.
«El mensaje no fue bueno ni siquiera para el doctor Uribe. Pues Bush durmió en todos los demás países pero no en Colombia. Eso significa que la política de seguridad democrática no es confiable ni siquiera para Estados Unidos», concluyó.