«El Estado guatemalteco demuestra su debilidad al no manifestarse en contra de la ley antimigrantes SB-1070 del Estado de Arizona, que perjudica a aproximadamente cuatrocientos sesenta mil inmigrantes, entre ellos familias enteras y estudiantes», informaron los representantes de la Pastoral de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal de Guatemala.
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Los legisladores no deben únicamente expresar su preocupación por la polémica ley, sino actuar urgentemente en la aprobación de una reforma integral a la ley migratoria, aseguró el padre Mauro Verzeletti, secretario adjunto de la Pastoral de Movilidad Humana.
«La reforma migratoria en Estados Unidos evitaría la irresponsabilidad de los estados, preocupándonos grandemente el camino equivocado que los gobiernos están tomando en el abordaje del tema migratorio, sin un mínimo de respeto a los derechos humanos».
Aseguró que existe una postura débil ante el tema migratorio «tanto del Estado guatemalteco como de los estados de Centroamérica. Yo creo que los gobiernos deben tomar una postura conjuntamente, a pesar que han expresado que tienen el interés de trabajar, pero no se ha visto un papel efectivo de parte de los estados de la región a una demanda.»
NEGOCIAR
Verzeletti indicó que «es necesario negociar el tema migratorio en el marco del Tratado de Libre Comercio, empezar a realizar ciertos tipos de boicots de los productos norteamericanos que están llegando a Centroamérica, y cuando exista una iniciativa firme y determinante de parte del Estado de Guatemala y de Centroamérica, desde ahí podría empezar a haber una reacción distinta por parte del gobierno norteamericano y de otros gobiernos estatales».
EXPULSIí“N
«Es muy preocupante el hostigamiento que existe en contra de los inmigrantes latinos y principalmente de los indocumentados, existiendo hechos como la expulsión de los niños y niñas de las escuelas, siendo una acción que viola los derechos humanos de los indocumentados.»
RECHAZO
La Pastoral de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal de Guatemala hace el llamado urgente a los gobiernos centroamericanos a rechazar todas aquellas leyes que violan los derechos humanos de los migrantes, asimismo, a que ejecuten acciones coherentes y coordinadas de forma inmediata para la anulación de leyes que criminalicen a los migrantes, y trabajar en conjunto por beneficio de todos los migrantes.
Conamigua se une al rechazo de la Ley de Arizona que criminaliza, discrimina y acosa a migrantes centroamericanos que residen en ese estado norteamericano, promoviendo así la migración hacia otros estados, donde posiblemente podrían llevarse a cabo nuevamente leyes que persigan a los indocumentados, hasta deportarlos hacia su país de origen, sin familia y sin dinero.