En un avión privado procedente de la ciudad de Mesa, Arizona, arribó a Guatemala uno de los primeros vuelos, desde que se anunció una crisis humanitaria por los migrantes en EE. UU., que se esperan con familias guatemaltecas que ingresaron irregularmente a suelo norteamericano.

Se trata de cinco núcleos conformados por adultos y ocho menores de edad.

Tal como lo venían advirtiendo autoridades de Estados Unidos, al filo del mediodía ingresó un avión privado a las instalaciones de la Fuerza Aérea Guatemalteca procedente del estado de Arizona, con familias guatemaltecas que recientemente cruzaron sin documentos la frontera estadounidense.

De acuerdo a información del Ministerio de Relaciones Exteriores y la Dirección General de Migración, se trata de cinco núcleos familiares conformados por padres de familia y ocho menores de edad, los que fueron expulsados de la nación norteamericana por ingresar ilegalmente en aquel país y tras permanecer varias semanas en albergues temporales a la espera del proceso de deportación.

Personal de los gobiernos de Guatemala y Estados Unidos, así como de la Procuraduría General de la Nación participaron en el recibimiento. Un par de horas antes, otro vuelo de mayores de edad llegó al territorio nacional.

Éste es considerado por las autoridades el primer vuelo que deporta desde EE. UU. a niños y adolescentes guatemaltecos luego que el presidente estadounidense Barack Obama, calificara la masiva migración de menores de edad no acompañados de México y Centroamérica hacia Estados Unidos, como una crisis humanitaria.

Fuentes oficiales calculan en el presente año un total de 52 mil menores solos que han cruzado la frontera de México hacia Estados Unidos, especialmente por el suroeste del estado de Texas.

Por su parte, la Cancillería guatemalteca estima que 11 mil 644 niños migrantes guatemaltecos podrían permanecer aún detenidos en albergues y bases militares del país del norte.

Cabe mencionar que organizaciones pro migrantes, así como activistas de Derechos Humanos, han señalado en repetidas ocasiones que el Estado de Guatemala no está listo para recibir a miles de niños que permanecen de manera irregular en EE. UU., quienes en los próximos meses serían deportados en caso se cumplan las advertencias que han hecho funcionarios del gobierno de ese país respecto de acelerar la expulsión de los menores.

Asimismo, estos grupos han denunciado que luego de ser detenidos por la Patrulla Fronteriza de EE. UU., los menores son trasladados a centros de albergue temporales habilitados para que permanezcan con sus familias, en condiciones infrahumanas e insalubres para los infantes.

Según la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia, de enero a junio del presente año, 1 mil 786 menores han sido deportados al país, de los cuales 1 mil 717 han sido devueltos de México y 69 expulsados de Estados Unidos.