Hoy se realiza el encuentro de organizaciones de la Sociedad Civil representados ante el Sistema Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional, las cuales señalan que la crisis de seguridad alimentaria en Guatemala se ha profundizado por los altos costos de la canasta básica alimentaria y la vital,

ya que en los últimos años ha ido en aumento, Q2mil 440 y Q4mil 452, mientras que los salarios están en Q2 mil 074, por lo que no logran suplir dichas necesidades elementales de las personas trabajadoras formales.

Según estas organizaciones, existen fuertes demandas sobre el cumplimiento del salario mínimo establecido, pues un porcentaje significativo de la población no cuenta siquiera con dichos ingresos mínimos, lo que repercute en no poder cubrir sus necesidades básicas.

En el 2011, según estas organizaciones, la canasta básica registró un alza de Q24.60 y cerró en Q2 mil 440.20 para compra de los 26 artículos básicos, y de Q81.34 la canasta básica ampliada, que registró un incremento de Q44.89 para cerrar en el año en Q4 mil 452.

Por tales razones es necesario incrementar el salario mínimo a Q100 diarios, tanto para el campo como para la ciudad, señalan las organizaciones antes mencionadas; además indican que como sector de sociedad civil habían hecho una propuesta para que el salario de los trabajadores agrícolas y no agrícolas pasara de los Q63.70 a Q66.80 por día, y para los trabajadores de la maquila de Q59.45 a 62.42. Sin embargo, el salario mínimo para el 2012 es de Q2 mil 074 para trabajadores del sector agrícola y no agrícola, y de Q1 mil 906.25 para los trabajadores de maquila y una bonificación de Q250.

SEGURIDAD O SOBERANÍA ALIMENTARIA

Además estas organizaciones indican que Guatemala se ha acentuado en el tema de la seguridad alimentaria, pero no en la soberanía alimentaria, ya que las políticas públicas relacionadas con la alimentación se han quedado cortas o no las han puesto en marcha.

Señalan que la crisis alimentaria prolongada sigue causando estragos graves, sobre todo por el continuo incremento en los precios de alimentos y combustibles.

Expresan que el grado de afectación de la crisis alimentaria está determinado por factores tales como el grupo étnico y el nivel de educación, lo que evidencia la perpetuación de parámetros de discriminación y exclusión social.

SIN POLÍTICAS DE DESARROLLO

Mientras el Estado continúa realizando algunos esfuerzos para paliar la situación de desnutrición, sin acompañarlos debidamente con políticas estructurales que aborden las causas de la pobreza y hambruna en el país, se tendrá una Guatemala como la que tenemos actualmente, declaran dichas organizaciones.

Además señalan que las políticas agrarias y de desarrollo rural siguen sin contar con presupuestos adecuados, y que los conflictos agrarios siguen multiplicándose, ya que la expansión de la producción de agrocombustibles y megaproyectos tienen graves implicaciones en el derecho de la alimentación.

Aseguran que la falta de aprobación de la Ley de Desarrollo Rural Integral y la falta de una Política Nacional de Desarrollo Integral, a través de presupuestos adecuados, no permite poder priorizar el desarrollo rural ni la política agraria en el país, dado que no existen políticas estructurales de Estado que aborden las causas generadoras del hambre y la pobreza en el país.