Arístides Crespo, jefe de la bancada del FRG, considera que el proceso en que se vincula al general Efraín Ríos Montt con la quema de la Embajada de España ocurrido en 1981, desvía la atención de los guatemaltecos hacia la crisis provocada por la quiebra del Banco del Café.
En otras ocasiones cuando habían temas que dañaban la imagen de los gobiernos se recurrió a temas como la Independencia de Belice, la extradición del ex presidente Jorge Serrano Elías, la captura del Alfonso Portillo y ahora la persecución contra Ríos Montt.
Crespo añadió que no pueden juzgar ni demandar al general Ríos Montt por hechos que ocurrieron en 1981 pues el general estaba retirado de la vida política.
«Vemos una persecución política, lo hemos reiterado, si el general fuera una persona anónima sin la posición que ocupa en el escenario nacional nadie lo persiguiera», dijo Crespo.
El funcionario añadió que no hay motivo para que un guatemalteco tenga que rendir cuentas a los tribunales españoles. «Hace 500 años ellos vinieron a Guatemala, conquistaron y mataron gente y todavía pretender ser conquistadores», añadió.
En 1981 el general José Efraín Ríos Montt estaba retirado de la vida política y de su carrera militar.
Los eferregistas están preparados para acudir a los Tribunales para cumplir con la Ley y el Estado de Derecho.
Consideran que un guatemalteco no tiene porqué acudir a tribunales españoles cuando sus procesos jurídicos deben ventilarse en el país.
Se debe trabajar en la reconciliación de los guatemaltecos y no en la confrontación.