Crece tensión agraria en Argentina


Unos granjeros argentinos bloquean una carretera en la locación de Entre Rí­os, en el primer dí­a de la protesta, el pasado sábado. Hoy se cumple el tercer dí­a de protesta, de los siete anunciados por los trabajadores del campo. FOTO LA HORA: AFP RICARDO SANTELLAN

Agricultores de Argentina cumplí­an hoy el tercer dí­a de una huelga patronal en reclamo de una reducción de impuestos a las multimillonarias exportaciones de soja, en un conflicto politizado por el año electoral, con tensión e incidentes en las rutas.


La confrontación con el gobierno de la presidenta Cristina Kirchner se agudizó a tres meses de las elecciones legislativas, si el Congreso aprueba esta semana un adelantamiento de la fecha de octubre a junio, en medio de una fuerte baja de precios internacionales y la peor sequí­a en medio siglo.

Argentina exportó el año pasado materias primas agrí­colas y productos agropecuarios por 35 mil millones de dólares, aunque este año se espera una fuerte caí­da, que alcanzará a la soja, a causa de la crisis global.

A diferencia del año pasado, cuando una decena de huelgas agrí­colas contó con el respaldo de otros sectores, esta semana se acrecentaban las peleas entre agricultores y transportistas afectados por los bloqueos carreteros.

Un momento de tensión se registró hoy en la estratégica ruta 14 del Mercosur, a la altura de Gualeguaychú (230 km al norte), cuando camioneros intentaron atravesar un piquete rural, lo que derivó en forcejeos, golpes y choques verbales con los huelguistas.

Un jefe del sindicato de Camioneros, Antonio Alisegui, dijo que «los enfrentamientos se van a profundizar porque los productores están «recontra» agresivos»» y pidió a la Gendarmerí­a que levante el bloqueo.

La oposición socialdemócrata, derechista y liberal apoya a las patronales agrarias en su enfrentamiento con el Gobierno, que dijo no estar dispuesto a bajar el 35% de impuesto a la soja, que le reportará este años ingresos fiscales por unos 5 mil millones de dólares.

La soja ocupa más del 50% de la superficie sembrada en un paí­s donde ha caí­do la producción de trigo y maí­z, granos en los que suele figurar entre los lí­deres mundiales, además de bajar el volumen en carne y lácteos.

Empresarios de la carne admitieron hoy que pueden producirse aumentos inflacionarios a causa de la casi nula provisión de ganado a los mercados, cuando un cuestionado í­ndice oficial de precios lleva acumulado 1,0% entre enero y febrero, aunque consultoras privadas lo ubican en casi el triple.