Crece impaciencia por demora en divulgación de escrutinio


La impaciencia crecí­a hoy en Zimbabue ante la lenta divulgación de resultados de las elecciones del sábado, en las cuales la oposición al presidente Robert Mugabe lleva una ligera ventaja en cantidad de escaños parlamentarios, aunque nada se sabe del escrutinio de la presidencial.


El opositor Movimiento para el Cambio Democrático (MDC) ya se aseguró 56 escaños -de los 210 del Parlamento- frente a 53 de la oficialista Unión Nacional Africana de Zimbabue – Frente Patriótico (Zanu-PF), indicó la Comisión Electoral.

Nada se sabí­a en cambio de la contienda presidencial, en la cual Mugabe, de 84 años, espera obtener su sexto mandato consecutivo; sus principales adversarios son el lí­der del MDC, Morgan Tsvangirai, y el ex ministro de Finanzas Simba Makoni.

Las fuerzas de seguridad estaban el martes en alerta máxima, particularmente en Harare, aunque la calma reinaba en la capital.

Pero la impaciencia por conocer los resultados era palpable en las colas frente a los kioskos de diarios, vendidos en algunos casos al triple de su precio.

«El Zanu-PF y el MDC están cabeza a cabeza», titulaba el estatal The Herald.

Algunos electores expresaban escepticismo sobre la veracidad de los cómputos oficiales, argumentando que el Zanu-PF deberí­a sufrir una contundente derrota como sanción por el derrumbe económico del paí­s.

El MDC hizo sus propias proyecciones y estima que obtuvo una clara victoria tanto en la presidencial como en las legislativas.

Pero según una respetada red de organizaciones no gubernamentales, que desplegó 8.000 observadores en todo el paí­s, Tsvangirai quedó apenas por debajo del 50% necesario para ganar en la primera vuelta.

De acuerdo con la Red de Apoyo a las Elecciones Zimbabuenses (ZESN), Tsvangirai obtuvo 49,4% de los votos, frente a 41,8% para Mugabe y 8,2% para Makoni.

Si ninguno de los candidatos obtiene la mayorí­a absoluta, se celebrará una segunda vuelta en tres semanas.

Tsvangirai no volvió a mostrarse en público desde el sábado, cuando acusó a las autoridades de buscar retardar el escrutinio, aunque podrí­a dar una conferencia de prensa este martes.

Las fuerzas de seguridad estaban en alerta máxima, particularmente en Harare, aunque la calma reinaba en la capital.