Costa Rica es «Costa Lista»: «En el futbol no todo son los pies»


depo2_2

Que el mayor hito del futbol de un país dependa de que un jugador anote o no un penal quebraría los nervios de cualquiera. No fue el caso de los futbolistas de Costa Rica, que fríos e impasibles marcaron los cinco lanzamientos con la serenidad que sólo da el estudio.

Por Daniel García Marco
Río de Janeiro / dpa

«Un aspecto fundamental en el desenvolvimiento de un deportista pasa por la educación», afirmó en una entrevista con la agencia dpa la pasada semana Luis Gabelo Conejo, héroe de la Costa Rica que maravilló al mundo en el Mundial de Italia 90 y preparador de porteros del equipo actual, que por primera vez en su historia ha alcanzado los cuartos de final de una Copa del Mundo.

   Costa Rica pasa por ser uno de los países de mayor desarrollo de Centroamérica y hasta se la considera la Suiza de la región. El progreso se nota también en el ámbito educativo, y como una selección de fútbol suele ser reflejo de un país, también se está proyectando en las canchas de Brasil.

   «Una persona que está preparada académicamente tiene ese grado de madurez para valorar y saber separar en su momento una presión, un problema y cuándo tiene que ser eficiente y responsable en el trabajo que le tienen asignado», explicó Conejo antes del partido del domingo ante Grecia, donde los jugadores le dieron la razón: pese al cansancio de 120 minutos de juego y de haber estado mucho tiempo en inferioridad numérica, anotaron los cinco penales con un aplomo sustentado en los libros.

   «De estos chicos, varios son profesionales académicamente y el 95 por ciento está estudiando una carrera universitaria», dijo Conejo.

   El centrocampista Celso Borges, que anotó el primer penal, está convencido de que la universidad ayuda sobre el césped.

   «Uno entiende las instrucciones mejor, logra analizar en diferentes situaciones de partido lo que está pasando en ese momento», afirmó, tras el triunfo ante Grecia, Borges, que juega en Suecia y que se desenvuelve con fluidez en inglés, al igual que otros compañeros que actúan en Europa, Estados Unidos o en la liga local.

   «Cuando uno estudia, inclusive leer, esas cosas ayudan a estar supercognitivo para poder acatar instrucciones, aprender cosas nuevas de la formación y esas cosas son muy importantes. También hemos entrenado muchísimo y eso ayuda. Ya hemos pasado por eso, ya sabemos lo que hay que hacer, así que estamos tranquilos», aseguró Borges, como si hubiera una fórmula científica o un manual con el que controlar el azar del fútbol.

   Formación y trabajo para tener todas las respuestas el día del examen. En eso cree el minucioso seleccionador «tico», el colombiano Jorge Luis Pinto, que como un aplicado estudiante, no deja nada para última hora ni se salta clases.

   «Es muy estricto a la hora de trabajar, nos ha ayudado mucho en la parte táctica», dijo el centrocampista Christian Bolaños sobre Pinto, que asegura que tenía perfectamente planeado quiénes y en qué orden lanzarían los penales ante Grecia. Los hubo y aplicó el plan.

   La formación de los jugadores costarricenses, atentos, educados y articulados en su discurso, características no siempre visibles en otros futbolistas, facilita el trabajo de Pinto, que ya alecciona a sus pupilos sobre cómo hacer daño a Holanda el sábado en cuartos.

   «El jugador preparado asimila mejor, el jugador que tiene un nivel intelectual aprende más rápido, se entrega y se aplica mejor a actividades técnico-tácticas, y tiene mejor comportamiento en el campo de juego, gran personalidad, asimila todos los criterios que tenemos de manera mental, la parte táctica y la estrategia», explicó el seleccionador.

   El entrenamiento de cuello para arriba también convence a sus hombres. «Ayuda a tener la parte mental bien, más aún cuando se enfrenta este tipo de partido, este tipo de exigencias. Es importante tener ese control mentalmente. En el fútbol no todo son los pies, hay que pensar bastante, tener tranquilidad en los momentos de presión y sí ayuda la formación académica», afirmó Bolaños.

   «En nuestro país intentamos que la parte educativa vaya al lado de la deportiva», dijo Conejo, miembro del cuerpo técnico del analítico Pinto. «A nivel de selecciones menores, el muchacho que no tenga un buen nivel académico no puede estar en la selección», reveló el ex portero. Los libros ayudan. También sobre el césped, con las pulsaciones disparadas y mientras se escribe una página histórica en el fútbol de un país.
Bottom of Form