Costa Rica sigue a la espera de que el gobierno del presidente Barack Obama explique por qué lanzó un «Twitter cubano» secreto desde el interior de la nación centroamericana a pesar de las advertencias en 2009 de que ese plan podría poner en peligro sus relaciones diplomáticas entre los dos países.
En entrevista con The Associated Press, el canciller costarricense Enrique Castillo dijo que cualquier acción dirigida a afectar a otros países no debe realizarse desde el interior de Costa Rica, como lo fue el haber desarrollado una red de medios sociales primitiva, conocida como ZunZuneo, cuyo objetivo era generar inestabilidad política en Cuba.
Este medio social, que era una especie de Twitter pues permitía el envío de mensajes de texto a través de teléfonos celulares y la posibilidad de tener seguidores y, a su vez, seguir a personas y recibir información, fue creada a instancias la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés).
Pero sus usuarios no sabían que era financiada por el gobierno de ese país.
Castillo dijo que su gobierno no ha recibido respuesta a su pregunta, presentada un día después de que la AP reportara e informara sobre el tema el 3 de abril y consideró inapropiada la utilización de una Embajada en Costa Rica para este tipo de operación que perjudica a un tercer país.
El canciller señaló que Costa Rica no ha presentado una queja y «que las embajadas acreditadas en Costa Rica no tienen que presentar para aprobación sus planes o programas al gobierno costarricense».
La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, reconoció el miércoles que Costa Rica presentó una nota diplomática a la embajada de Estados Unidos en San José en la que solicitaba una explicación después de que se publicara el reportaje de investigación de la AP.
«En los días posteriores, el personal de la embajada ha conversado en múltiples ocasiones sobre el asunto con sus contrapartes del MRE (Ministerio de Relaciones Exteriores) y ese diálogo está en curso», dijo Psaki.
Centenares de documentos que obtuvo la AP muestran cómo contratistas de USAID crearon la red social llamada ZunZuneo y ocultaron sus vínculos con Estados Unidos a través de la utilización de compañías extranjeras y servidores que eran pagados a través de cuentas bancarias en las Islas Caimán.
El plan se inició después de que los contratistas consiguieran más de 400.000 números de teléfonos celulares en Cuba.