Los gobiernos no hacen lo suficiente contra la corrupción, e incluso uno de cada cuatro latinoamericanos piensa que la fomentan, según un sondeo de Transparencia Internacional (TI) en 62 países que deja mal parados a la policía, los partidos políticos y los Parlamentos.
Los resultados de la encuesta divulgados hoy en Bruselas son contundentes: sólo el 22% de las personas consultadas a nivel mundial piensan que su gobierno actúa en forma eficaz o muy eficaz contra el flagelo de la corrupción.
En cambio, la inmensa mayoría, el 69%, estima que la acción gubernamental es ineficaz.
De ese total, un 38% piensa la lucha contra la corrupción es ineficaz, un 16% estima que su gobierno no lucha para nada contra ese flagelo y el 15% dice que incluso lo alienta.
La opinión de los consultados difiere de un continente a otro.
Mientras el 78% de los ciudadanos de Norteamérica de (Estados Unidos y Canadá) y el 70% de los europeos juzgan ineficaz la acción de sus gobiernos, ese porcentaje se ubica en 71% en Latinoamérica y 53% en ífrica, si bien en estas dos regiones la corrupción parece más arraigada.
En efecto, el 23% de los latinoamericanos piensa que su gobierno fomenta ese flagelo y una de cada tres personas tuvieron algún contacto con la policía para pagar sobornos.
A nivel detallado por países, los mexicanos y los paraguayos son quienes más desconfían de su gobierno, ya que el 43 y 40%, respectivamente, creen que alienta la corrupción.
En los otros países latinoamericanos en los que se realizó la encuesta los resultados son variados: mientras en Chile sólo el 8% estima que su gobierno fomenta la corrupción, ese porcentaje se eleva a 21% en Panamá, 20% en Colombia, 19% en Perú, 17% en Venezuela y 14% en Argentina.
En cuanto al pago de sobornos, el 28% de los mexicanos y bolivianos, el 26% de los paraguayos, el 23% de los dominicanos y el 21% de peruanos y venezolanos admitieron que en los últimos doce meses una persona de su familia recurrió a esta práctica, en particular con la policía.
Pero la fuerza policial no es la única institución que queda mal parada en el sondeo realizado por el instituto de sondeo Gallup sobre una muestra de 59.661 personas en 62 países, ya que los partidos políticos y los Parlamentos también son percibidos como muy corruptos por los encuestados.
En una escala de uno a cinco en orden creciente de percepción de corrupción, los consultados otorgan una calificación de 4 a los partidos políticos, 3,7 a los Parlamentos, 3,6 al sector privado de los negocios y 3,5 a la policía y al sistema legal y judicial.
En Latinoamérica, esa lista la encabezan los partidos políticos y la policía (4,2) y los Parlamentos (4,1).
La percepción de los partidos políticos y del poder legislativo como los más corruptos no hace sino reforzar la opinión de que las administraciones públicas no están obrando en su conjunto con eficacia para combatir la corrupción, indica el estudio.
En sus conclusiones, el informe de Transparencia Internacional señala con claridad que son los pobres quienes más se ven perjudicados por la corrupción.
Debido a que el pago de sobornos se detecta principalmente en los países más pobres, los efectos negativos de estas prácticas perjudican más a aquellos que menos pueden permitírselas, dice el estudio.
En esos países, el mal uso de los fondos públicos afecta principalmente al dinero que debería destinarse al agua potable, a las escuelas y a la atención sanitaria. Los riesgos para la vida son reales y aquellos que pueden cambiar las cosas deben actuar, agrega.
Los gobiernos no hacen lo suficiente para luchar contra la corrupción, según un sondeo realizado en 62 países por la organización Transparency International en el que la policía, los partidos políticos y los Parlamentos quedan mal parados.
Sólo el 22% de las personas consultadas a nivel mundial piensan que su gobierno actúa en forma eficaz o muy eficaz contra el flagelo de la corrupción, según la encuesta, cuyos resultados fueron divulgados el jueves en Bruselas.
Por el contrario, el 69% estima que la acción gubernamental es ineficaz: el 38% cree que la lucha contra la corrupción es ineficaz, el 16% piensa que su gobierno no lucha para nada y el 15% considera que incluso la alienta.
La opinión de los consultados difiere de un continente a otro.
Mientras el 78% de los ciudadanos de Norteamérica y el 70% de los europeos juzgan ineficaz la acción de sus gobiernos, ese porcentaje desciende a 71% en Latinoamérica y a 53% en ífrica, si bien en estas dos últimas regiones la corrupción parece más arraigada.
En este sentido, en Latinoamérica, mientras el 25% cree que el gobierno tiene una acción eficaz, el 23% piensa que lo fomenta.
Este sondeo mundial muestra que la corrupción tiene un efecto dramático en la vida de las personas, comentó Transparency International en un comunicado.
Esta encuesta fue realizada por el instituto de sondeos Gallup utilizando una muestra de 59.661 personas en 62 países.