Corea del Norte advirtió hoy que podría dejar de lado el acuerdo sobre el desmantelamiento de su programa nuclear si Estados Unidos sigue «presionando» al país, anunció la agencia oficial norcoreana KCNA.
Corea del Norte multiplicará sus esfuerzos para protegerse de un «ataque nuclear estadounidense y de un ataque preventivo» si Estados Unidos sigue «presionando a Corea del Norte con el pretexto del problema nuclear», prosiguió KCNA citando un comunicado de la misión militar norcoreana en Panmunjon.
«En tal caso, está claro que ni la puesta en práctica del acuerdo del 13 de febrero pasado ni el éxito de las conversaciones a seis serán posibles», agregó la agencia.
Diez inspectores de la Agencia internacional de la Energía Atómica (AIEA), son esperados el sábado en Corea del Norte para supervisar el comienzo del cierre del principal complejo nuclear del país.
«Con la ayuda que nos ha dado Corea del Norte en las últimas semanas, pensamos que nuestra tarea tendrá éxito», indicó Adel Tolba, jefe del equipo de inspectores, el viernes en el aeropuerto de Pekín, adonde llegó proveniente de Viena.
Corea del Norte, que el año pasado procedió a su primer ensayo nuclear, ha afirmado constantemente que necesita armas nucleares para disuadir a Estados Unidos de un ataque preventivo destinado a derrocar el régimen de Pyongyang.
Estados Unidos retiró sus armas nucleares de Corea del Sur en 1991 y mantiene en ese país a 29.500 militares.
«Estados Unidos es un partido belicoso hostil a la República democrática de Corea (RDPC) y técnicamente los dos países están en guerra», indicó la declaración atribuida al jefe de la misión militar norcoreana en el poblado fronterizo de Panmunjom.
«Es un derecho innegable y legítimo para la RPDC el tener todos los medios de autodefensa posible para enfrentar la amenaza y el chantaje de Estados Unidos para proteger su derecho a la existencia», agrega el comunicado.
El texto también llama a conversaciones militares sobre la seguridad de la península con Estados Unidos y en presencia de un representante de la ONU.
Según los analistas, el objetivo del comunicado es mantener un control sobre posibles futuras negociaciones para un acuerdo que ponga fin oficialmente a la guerra de Corea (1950-1953). Un armisticio se firmó al final del conflicto.
«Esto no obstaculizará las conversaciones a seis», indicó Kim Keun-Sik, profesor de la Universidad de Seúl, especialista en Corea del Norte.
Las conversaciones a seis que reúnen a las dos Coreas, Estados Unidos, China, Rusia y Japón, deben reiniciarse el miércoles.
Deben abordar las próximas etapas del proceso, después de que se detenga el reactor de Yongbyon, eje del dispositivo nuclear norcorerano, bajo supervisión de la AIEA.
Según el acuerdo de los Seis, Corea del Norte, en situación de penuria energética, recibirá millones de toneladas de fiul, ventajas diplomáticas y garantías de seguridad, a cambio del desmantelamiento del conjunto de su programa nuclear.
Las negociaciones sobre un «acuerdo de paz permanente» forma parte del «conjunto».
El cierre del reactor de Yongbyon, a cambio de lo cual Corea del Norte recibirá 50.000 toneladas de fiul proveniente de Corea del Sur, es la primera etapa del proceso.