Los ministros europeos y africanos destacaron hoy la necesidad de una mayor cooperación sobre todos los asuntos concernientes a las migraciones, al abrirse una conferencia sobre este tema en Trípoli.
«En Trípoli, nosotros, los países euro-africanos, diremos al mundo que es urgente y necesario armonizar las políticas, tanto estatales como internacionales y regionales», declaró el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel íngel Moratinos.
Moratinos destacó la necesidad de «medidas estructurales que tengan en cuenta las causas profundas de la emigración», y abogó «por la apertura de un horizonte de esperanza para los emigrantes y la represión de las redes de delincuencia organizada de tráfico de personas».
Reunidos bajo una carpa gigantesca más de 50 ministros de los países miembros de la Unión Africana y de la Unión Europea deben examinar un proyecto de declaración «que cubra todo el abanico de asuntos concernientes a las migraciones», se indicó de fuente europea.
Europeos y africanos deben adoptar una declaración conjunta y un plan de acción contra el tráfico de seres humanos.
La declaración debe referirse igualmente a las migraciones legales y a la inmigración clandestina, migraciones y desarrollo, y protecciones de los refugiados, así como problemáticas más amplias como la paz, la seguridad y los derechos humanos, añadió la misma fuente.
La conferencia adoptará igualmente un plan de acción UA-UE sobre la lucha contra la trata de seres humanos, en particular de niños y mujeres.
El ministro libio de Relaciones Exteriores, Abdelrahman Chalgham, indicó al inaugurar la reunión que «las soluciones represivas no bastan para luchar contra la inmigración clandestina», recomendando un tratamiento global del problema que tenga en cuenta el desarrollo de ífrica.
El ministro finlandés de Relaciones Exteriores, Erkki Tuomioja, cuyo país asegura la presidencia semestral de la UE, afirmó «el compromiso total de UE en el desarrollo de ífrica».
«La UE otorga una gran importancia a los tratamientos regionales de la migración», indicó Tuomioja, destacando la necesidad de identificar las acciones comunes sobre las migraciones que siguen itinerarios específicos.
El vicepresidente de la Comisión Europea, Franco Frattini, recalcó por su parte la necesidad de abrir el mercado europeo del trabajo a los emigrantes africanos, adoptando un sistema de cuotas que tenga en cuenta las necesidades de cada país.
Para Bruselas esta conferencia debe inspirarse en la de Rabat, el pasado mes de julio, que había definido una estrategia de trabajo sobre las rutas migratorias de ífrica central y del Oeste hacia Marruecos y las islas Canarias (España).
En una declaración publicada al margen de la conferencia, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) destacó que «los debates sobre los flujos migratorios mixtos deben tener en cuenta el hecho de que, entre quienes buscan entrar en ífrica legal o ilegalmente desde ífrica, hay refugiados y otras personas que necesitan protección».