Conversatorio sobre códices mayas


A las cinco de la tarde, como el poema de Garcí­a Lorca. Lugar, salón de la Embajada de México, Luis Cardoza y Aragón, tuvo desarrollo ante concurrencia numerosa, el 16 de abril. Editorial Amanuense con el copatrocinio de entidades afines invitaron al conversatorio sobre códices mayas, todo un evento cultural de trascendencia.

Juan de Dios Rojas
jddrojas@yahoo.com

Grandes expectativas fueron marco simbólico que antecedió a la relevante actividad. En afecto, en más de una ocasión nos hacemos interrogantes. Acerca de qué son los códices, qué significan y qué es su finalidad, entre otras de similar í­ndole, a la espera natural de respuestas exprofeso, que nos satisfagan.

El conocimiento en torno a la civilización maya, referente a los códices, para una mayorí­a es deficiente. No pasa del hecho que sus originales están en Europa. Llamados de Madrid, Parí­s, Dresde y Grolier. Editados por Amanuense su réplica artí­stica comprende dos libros: en uno el de Madrid (el más extenso) y en otro los restantes.

Somos seres necesitados de ensanchar el saber de todo lo nuestro, a retroalimentar el mismo mediante ocasiones propicias en el pequeño universo nacional. Empero al profundizar acerca del misterioso mundo maya, tomamos conciencia de cuán inmenso es dicho cosmos, empalmado a la cultura universal, junto actitudes contemplativas.

En ese contexto comprendemos aunque en una aproximación qué circunstancias aunque breves alimentan el sabor de la plurivalencia de los mayas eternos, reza un pensamiento válido y estimulante. Datan de muchos siglos antes de Cristo; eso basta para medir o evaluar tan cimera civilización, inclusive lo clásico tardí­o.

Bien sabido viene a ser que actividades de tal naturaleza no son hechas por generación espontánea. Razón por la cual hay que justipreciar a quienes intervinieron en su realización, un verdadero oasis en el ambiente preñado de sucesos ilí­citos, dañinos hasta la saciedad, que es poco decir en el momento actual.

La moderadora del conversatorio aludido fue la muy leí­da columnistas de Prensa Libre y profesional de altos vuelos, Carolina Escobar Sarti. En tanto los conversadores: Diego Matul maya cakchiquel, académico prestigioso y el arquitecto Federico Fahsen, connacional de gran valí­a y méritos en ese campo fértil.

Ambos incursionaron desde tiempo atrás en estudios e investigaciones alrededor de los códices mayas, testimonio fiel del dominio que tuvieron y fomentaron por los siglos de los siglos esta civilización que sacratiza la naturaleza, animales, fenómenos y el acontecer de sus ancestros.

Matul se desenvolvió con talento, elocuencia en su discurso que denota su identidad con aquellas raí­ces y mucha hondura en el nivel afectivo de los mayas. Afirma que los códices en sí­, constituyen una interrogante al igual que la interacción e interculturidad asombrosa lo coadyuva.

Por su parte Fahsen persuade al auditorio a través de sus ejecutorias en ese campo frondoso y misterioso, que sobrepasa los 30 años. Cada una de sus participaciones batieron palmas, al igual que su antecesor. Se considera una cátedra impresionante, y reafirma con vehemencia y sutileza el caso trascendental que los códices mayas son auténticos, sin asomo de duda.

Un rol destacado desarrolló de manera hábil y segura de sí­ misma, capaz de mantener con ejemplar didáctica la atención general. A la vez manejó con maestrí­a, fruto de su experiencia en ese y otros ámbitos, la moderadora Carolina Escobar Sarti. Un acierto representó su escogencia personal y amplios dotes en la senda de la comunicación.