Continuarán testimonios


Proceso de investigación relacionado con la muerte de tres diputados al Parlacen se desarrolló durante esta semana con puntos positivos y negativos.

El Ministerio Público concluye esta semana con puntos positivos y negativos en cuanto a la investigación abierta tras la muerte de los tres diputados al Parlamento Centroamericano.

Amalia Hernández
hernandeza@lahora.com.gt

Esta semana se inició con la noticia negativa de la muerte de los cuatro elementos de la Policí­a Nacional Civil, ejecutados dentro de la cárcel El Boquerón, en Cuilapa, Santa Rosa. Los agentes policí­acos eran investigados por su posible responsabilidad en el asesinato de los tres diputados al Parlamento Centroamericano.

De acuerdo con las pesquisas recabadas por el ente investigador, a la fecha aún se mantienen dos hipótesis en relación a lo sucedido el domingo 25 de febrero a eso de las 16:00 horas en el penal.

Varios de los reclusos de El Boquerón han sido entrevistados por fiscales del caso, algunos de ellos afirman que un grupo de personas ingresaron a la cárcel y asesinaron a los cuatro PNC; otra versión en cambio refiere que el crimen habrí­a sido cometido por mareros recluidos en el penal.

Pero las dos teorí­as manejadas hasta hoy por los investigadores del MP, tienen un punto de coincidencia, el hecho sangriento no podrí­a haber sucedido sin la colaboración y apoyo de los guardias del reclusorio, quienes estaban de turno el dí­a del crimen.

Los fiscales al encontrar el punto de convergencia de las investigaciones, solicitaron al juez de Primera Instancia Penal de Cuilapa, Santa Rosa, la detención de los 24 elementos de presidios, incluyendo al alcaide y director de la cárcel El Boquerón.

La sindicación por parte de la fiscalí­a refiere que los guardias del sistema penitenciario habrí­an incurrido en el delito de asesinato, incumplimiento de deberes y encubrimiento.

Fueron trasladados

Las veinticuatro personas fueron trasladadas el martes recién pasado, bajo estrictas medidas de seguridad, hacia el centro preventivo de la zona 18 en calidad de detenidos, al dí­a siguiente el juez de turno Ví­ctor Hugo Pérez, en la Torre de Tribunales recibió la primera declaración de los sindicados, pero fue el juez de Cuilapa quien les declaró el auto de procesamiento y prisión preventiva.

Los agentes Luis Herrera López, José Gutiérrez, Marvin Escobar y José Korki López, de acuerdo con el informe médico forense habrí­an recibido heridas con arma blanca y disparos de arma de fuego.

En lo que se presume habrí­a sido la escena del crimen, los investigadores no lograron recabar mayor evidencia, ya que se notaba que la misma habí­a sido alterada.

«No logramos encontrar huellas debido a que era visible que parte de la escena del crimen habí­a sido lavada; en puertas y ventanas tampoco se logró obtener evidencia debido al material con que fueron elaboradas», explicó el fiscal de la investigación, ílvaro Matus.

Fue hasta dí­as después cuando se conoce que habrí­an sido encontrados dentro del penal varios objetos punzocortantes, mismos que según las fuerzas de seguridad se intentaban sacar a través de aparatos eléctricos.

Hasta hoy no existe la información oficial de quién o quiénes asesinaron a los agentes de la PNC y el móvil del crimen.

Se entrega sospechoso

El miércoles por la tarde, según declaraciones del director de la Policí­a Erwin Sperisen, se habrí­a entregado a la justicia Marvin Contreras Natareno, sindicado del delito de asesinato por la muerte de los cuatro salvadoreños.

Contreras Natareno fue escuchado por el juez noveno de instancia penal Nery Medina, quien decidió enviarlo a prisión preventiva mientras el Ministerio Público efectúa las investigaciones para la acusación formal.

Ese mismo dí­a, Contreras Natareno es trasladado al preventivo de la zona 18 bajo estrictas medidas de seguridad, tomando en cuenta lo acontecido con cuatro de sus compañeros en El Boquerón. La Procuradurí­a de Derechos Humanos y la Defensa Pública Penal solicitaron las garantí­as necesarias para el sindicado.

Se le designaron para su seguridad dos elementos de la PNC, dos del sistema penitenciario, uno del Ejército, un delegado de la PDH y una persona que prueba los alimentos antes de ser ingeridos por el procesado.

Rumores

También se rumoró que se habrí­a entregado a la justicia Jeiner Barillas Recinos, otro de los sospechosos del crimen contra los parlamentarios, sin embargo todo quedó en rumor.

Para la próxima semana, la Fiscalí­a de Delitos Contra la Vida tiene previsto recibir las declaraciones de más testigos en relación a la muerte de los tres diputados al Parlacen y el conductor del vehí­culo donde éstos viajaban.