La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) de San Marcos, mantiene un constante monitoreo y comunicación con las organizaciones locales, para controlar el estado del tiempo y la acumulación de agua en el suelo por las lluvias, informó el Secretario Ejecutivo, Jensy Herrera.
Las precipitaciones, que fueron fuertes y constantes en los últimos días, dejaron daños mínimos en la infraestructura de San Marcos; se reportaron dos viviendas dañadas por los deslizamientos, una en El Tumbador y la otra en El Quetzal, además de inundaciones en el caserío Almendrales, en Ocós, situado en el litoral pacífico.
La topografía irregular del departamento lo hace más vulnerable a los temporales, a los derrumbes y a los deslaves, especialmente en los suelos abruptos que se localizan en Tacaná, en Sibinal y en Tajumulco; también en la cabecera departamental de San Marcos y en San Pedro y San Antonio Sacatepéquez, señaló el funcionario.
El fenómeno, que se ha caracterizado por las copiosas y prolongadas lluvias, ha provocado la crecida de algunos ríos, mientras que otros han salido de su cauce, así como inundaciones en comunidades de El Rodeo, El Tumbador, San Pablo, Ayutla y en Ocós, expresó Herrera.
Las y los pobladores de los 29 municipios de San Marcos se encuentran organizados para enfrentar cualquier emergencia, especialmente para prevenir y mitigar los efectos de los desastres y brindar a ayuda a las familias afectadas, añadió el entrevistado.
De acuerdo con el experto, la Secretaría Ejecutiva de la Conred cuenta con recursos básicos y mínimos para socorrer a la población al menos por 72 horas, entre los que se destacan 700 raciones familiares, 100 esponjas y ponchos, agua pura, pilas para linternas y platos, entre otros.
Aun cuando en los siguientes días la canícula conllevará ventajas para los territorios que han acumulado humedad, es fundamental que la población se mantenga al tanto de las informaciones que divulgan las autoridades locales y el instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), concluyó Herrera.
El Insivumeh en un comunicado de prensa, destacó que las condiciones meteorológicas de julio serán favorecidas por la canícula, un periodo de disminución en los acumulados de lluvia; puede tener entre 5 y 10 días de duración y estadísticamente deben presentarse entre el 10 y el 20 de julio y el 5 y 15 de agosto próximo.